Bankia continuará reduciendo los activos problemáticos a lo largo de este ejercicio de manera orgánica y mediante la venta de carteras con el fin de «liberar liquidez» y recursos para conceder nuevos créditos en segmentos estratégicos, como particulares, pymes y consumo.

El objetivo que persigue el banco que preside José Ignacio Goirigolzarri para 2017 es consolidar el negocio para fortalecer su posición competitiva, mejorar en rentabilidad y crecer en el negocio más recurrente para generar capital de manera orgánica.

Por eso, una de las estrategias clave de la entidad será situar al cliente en el foco de gestión, reforzando los vínculos con él para aumentar la fidelización.

El banco continúa así con la senda emprendida hace años y que le ha llevado a eliminar las comisiones a todos los clientes con nómina, a los usuarios de la Cuenta on y a los autónomos, una política que le ha permitido tener «clientes más satisfechos».

«La decisión de retirar las comisiones, con un impacto acotado en términos de resultados, ha tenido un efecto incluso mejor del esperado. El año pasado captamos más de 172.000 nuevas nóminas y subimos la cuota de mercado en tarjetas, en fondos de inversión y en las partidas de crédito que nos marcamos como prioridad: consumo y empresas», señaló Goirigolzarri.

Otras prioridades del banco para este ejercicio son continuar mejorando en rentabilidad y mantener el nivel de eficiencia «entre los mejores del sector financiero español», además de crecer en financiación al consumo, en pymes y autónomos «como vía para generar ingresos y mejorar los márgenes».