La C. Valenciana concentra el 15,7 % del suelo agrario que ha dejado de cultivarse en el conjunto del territorio español. De esta forma, el campo ha perdido una de cada cinco hectáreas durante los últimos años, lo que supone que «el 20% de la superficie de cultivo se encuentra abandonada», según Ava-Asaja.

La agricultura recuperó en 2016 un «exiguo» 0,96% de terreno para el cultivo, lo que equivale a un total de 1.577 hectáreas, pero «aún así fue la autonomía donde la recuperación de suelo agrario durante el año pasado resultó menor», destaca AVA-Asaja. La media española de recuperación de tierras agrarias fue del 2,55% .

Ava-Asaja ha incidido en que esa aparente estabilización en el ritmo de abandono de superficie dedicada a la agricultura en el territorio valenciano en 2016 resulta engañosa si tenemos en cuenta que en los cultivos tradicionales y de mayor implantación -cítricos y viñedo- continúo el descenso. El suelo dedicado a la producción de cítricos sufrió una disminución del 1,23%, mientras que en la viña la caída fue del 1,82 %.