El Instituto de la Empresa Familiar (IEF) propone 50 reformas necesarias en España para favorecer el crecimiento y la creación de empleo, entre las que destaca su decidida apuesta por un Pacto de Estado por la Educación y la simplificación y racionalización del marco regulatorio.
Así lo expusieron el director general del IEF, Juan Corona, y el director de Economía y Empresa de la misma institución, Esteban Sastre, en un acto organizado para presentar el estudio La dimensión empresarial como factor de competitividad, en el que se analiza la importancia del crecimiento empresarial para la evolución socio-económica del país.
En este sentido, del estudio se desprende que el tejido empresarial español se encuentra «muy atomizado», formado por 3,24 millones de empresas activas, de las que tan sólo el 0,7% cuenta con más de 50 trabajadores. De hecho, la media se sitúa en 4,5 empleados, un 22% por debajo del promedio de la UE-28.
La inferior dimensión de las empresas del país, junto a una esperanza de vida media de las mismas de 3 años, tiene un impacto directo en la competitividad que, a su vez, da lugar a un menor grado de internacionalización y poca inversión en I+D+i.
De esta manera, el IEF cree necesario la puesta en marcha de «medidas de calado que inviertan la dirección del modelo». El IEF propone un contrato único con indemnización creciente, flexibilidad interna y la conocida como «mochila austriaca».
En cuanto a la fiscalidad, el IEF propone la eliminación de los tributos que dificultan el inicio de las actividades económicas, una mayor colaboración entre la Agencia Tributaria y la Seguridad Social para luchar contra el fraude y la adecuación de las cotizaciones sociales a los estándares internacionales. El IEF propone que se realice una auditoría independiente, tanto financiera como de gestión, a las cuentas públicas.
