Aunque con muchísimo retraso, el plan eólico de la Comunitat Valenciana vuelve a ponerse en marcha. La empresa Enerfin Sociedad de Energía SL va a desarrollar en los próximos meses la construcción de un parque de 50 megavatios en Cofrentes, con catorce aerogeneradores, y una inversión prevista de 47,5 millones. El Diari Oficial anunciaba ayer la salida a información pública de este proyecto.
En estos momentos, el proyecto cuenta con una consulta ambiental previa favorable, con lo que no tendría que tener problemas para obtener los dos trámites pendientes: la declaración de Impacto Ambiental (DIA) y la autorización de la Conselleria de Economía. Desde este departamento, de hecho, entienden que si no hay problemas en el periodo de alegaciones de 45 días que se abre a partir de hoy, en menos de un año podría empezarse a construir.
La de Cofrentes es la primera noticia que rompe la dinámica de parálisis y el bloqueo que sufre el plan eólico de la C. Valenciana desde hace años. La Comunitat Valenciana, que está perdiendo el tren del desarrollo de esta energía renovable, tiene todo su territorio dividido en quince planes zonales. En sendas convocatorias en 2001 y 2008, el Consell del Partido Popular adjudicó a diferentes empresas energéticas la explotación de estas áreas, como Renomar; Enel; Corporación Acciona Eólica; Eyra; Eólica de Levante o Proyectos Eólicos Valencianos, entre otros.
El problema de este plan es que ha bloqueado cualquier desarrollo posterior de esta energía en el territorio autonómico: desde 2001 solo las concesionarias pueden desarrollarla. Y el problema es que, ni por asomo, han desplegado todos los megavatios que tenían adjudicados.
En estos momentos, solo están funcionando el 43% de los 2.700 MW de potencia adjudicados. Hay seis zonas completas pendientes de ejecutar, y otras, como esta zona 10, no estaban desarrollados al 100% los derechos de generación adjudicados, aunque Enerfín ya ha puesto en marcha algún parque.
En algunos casos, los operadores no habían obtenido la preceptiva declaración de impacto ambiental para poder desarrollar el parque. En otros casos, el desinterés de los propios empresas concesionarias tras el fin de los incentivos públicos a esta energía aparcaron sine die los proyectos.
2 años para desbloquear el plan
Este de Cofrentes, cuando se ponga en marcha, será el primer parque inaugurado en al menos siete años. En agosto de 2011 se pusieron en marcha los tres últimos parques, en la zona 12, que afecta a la Canal de Navarrés.
La reactivación de este parque llega además en un momento de tensión entre la Generalitat y el sector. La conselleria lleva dos años tratando de forzar a las empresas concesionarias, sin éxito, para que retomen los parques eólicos pendientes o renuncien a los derechos adquiridos para que la Generalitat pueda abrir el mercado a nuevos operadores. Pretende resolver en bloque todos los trámites administrativos pendientes antes de este verano.
La Abogacía, además, ha autorizado a la conselleria a dar por caducados esos expedientes, al haber pasado años desde la concesión sin que se desarrollaran los planes. Sea por la presión de la conselleria o por el interés de la propia empresa, el futuro parque de Cofrentes reactiva el plan valenciano.
