La Conselleria de Medio Ambiente ha dado al fin un paso más en la resolución del expediente abierto hace tres años y medio sobre la continuidad de la cementera Lafarge en la cantera del Salt del Llop de Sagunt. En ese tiempo, el enfrentamiento entre la multinacional y el ayuntamiento ha sido permanente, con picos de tensión como el encierro de decenas de trabajadores en el salón de plenos, y cuando todo parecía abocado a un pronunciamiento del pleno del Consell, la dirección general del Medio Natural y Evaluación Ambiental ha emitido un borrador de resolución que autoriza la continuidad de la actividad minera en la zona hasta 2042.

La administración autonómica limita el alcance de este trámite, que ha notificado a ambas partes, a la necesidad de «tener la confirmación formal de que el consistorio discrepa con la renovación del permiso», pero en el ayuntamiento ha provocado una enfurecida respuesta a través de la concejala de Presidencia, Teresa Garcia.

La también diputada autonómica por Compromís acusa a Medio Ambiente de una «dejadez» que permite «encubrir irregularidades» como «la destrucción de una montaña pública protegida» o «el abuso por parte de la multinacional del contrato con el ayuntamiento en relación a las cotas mínimas en la extracción de la piedra». La nacionalista advierte así de que este pronunciamiento «puede desembocar en un delito ecológico y prevaricación».

Estos argumentos municipales han sido trasladados en múltiples ocasiones a la conselleria, desde donde admiten que «sabemos su posición, pero en el expediente no consta formalmente ninguna discrepancia». Así, el pleno de Sagunt se volverá a convocar la próxima semana para que se pronuncie sobre este borrador, ya sea de forma favorable, en cuyo caso se concedería el permiso a Lafarge, o desfavorable, lo que supondría dejar la resolución definitiva en manos del pleno del Consell.