P El Sepblac, agencia pública en la que confluyen el Ministerio de Economía, Banco de España, Agencia Tributaria, Policía y Guardia Civil, se encarga de investigar las posibles operaciones de blanqueo de capitales. ¿Tienen mucho trabajo en la Comunitat Valenciana?
R Todo el Levante español, la costa desde la frontera con Francia hasta Portugal, es un área de riesgo por su ingente actividad económica. Es lógico pensar que aquí hay mucho más dinero que se mueve, que cambia de manos y, por tanto, venimos a inspeccionar aquí y no vamos a Albacete o Ciudad Real.
P ¿Qué tipo de casos son los que investigan con más frecuencia?
R Fundamentalmente, nuestro trabajo se centra en obligar a que se tomen las medidas necesarias para evitar el blanqueo. Por ejemplo, obligamos a que una caja de ahorros adopte determinadas precauciones.
P ¿Qué sectores siguen más de cerca?
R Actividades ligadas a la promoción urbanística y turística, intermediarios financieros, fondos de inversión, capital riesgo, grandes superficies... Todo lo que conlleve un gran movimiento de efectivo está en nuestro foco. Por ejemplo, el creciente juego «online». Ya mueve una barbaridad de dinero y cada vez va a más y con perfiles de chavales más jóvenes, que no saben dónde se meten. Se utiliza mucho para blanquear dinero cuyo origen puede ser desde el narcotráfico a lo que usted quiera imaginar. Cualquier actividad delictiva da dinero.
P ¿Cómo se hace? ¿Cómo se blanquea el dinero con el juego?
R Simulando ganancias o pérdidas mediante apuestas cruzadas. Se utiliza el «pitufeo», es decir, se paga a unos chavales para que hagan apuestas en un determinado sentido mientras otros lo cobran en otro sitio. O alguien juega contra alguien en una posición cerrada y lo pierde todo, o hay mucha gente que pierde mucho dinero en el mismo sentido. Hay varias formas.
P ¿Están las empresas de juego detrás de estas prácticas?
R No, no saben que la gente utiliza de manera fraudulenta su plataforma para transformar en «A» dinero en «B».
P Lo que se hacía toda la vida comprando un billete de lotería.
R Pero de una forma mucho más elaborada, porque si hago apuesta grande canta, pero si hago muchas apuestas pequeñas, no. Pago a gente y les digo, vete a tal sitio y juega en este sentido y pierde el dinero. Por cada 100 euros que pierdas yo te doy 10. Y en otro lado hay otra parte que ha casado la apuesta y se lleva 90 euros. Así, al delincuente le cuesta solo un 10 % blanquear el dinero. Mi trabajo es decirle a la empresa que tiene que poner medidas para evitar esto, o la sancionaré.
P¿Qué otros negocios tiene en el punto de mira?
R Cosas más tradicionales, como la promoción inmobiliaria o la compraventa de viviendas. La persona que vende una casa, sobre todo si es una agencia, también tiene obligación de informar si ve cosas sospechosas. El típico caso es el de un señor que llega a una inmobiliaria y dice que representa a una sociedad constituida en el Reino Unido a favor de un tercero y que quiere comprar una propiedad en España. También se dan muchos casos en el sector de las antigüedades o en las joyerías. Tuvimos un caso de una cadena de joyerías que, de repente, empezó a recibir un montón de compradores de origen chino.
P Habla de que la mayoría no informa al Sepblac cuando ve algo sospechoso, pero ¿quién está obligado a denunciar?
R La ley es tan amplia que prácticamente todo el mundo. Concesionarios, cualquier agente relacionado con el mundo inmobiliario, entidades financieras, aseguradoras, abogados, auditores, asesores fiscales, joyeros, anticuarios... Cualquiera que tenga conocimiento de una operación sospechosa.
P¿Está funcionando la limitación de pagos en efectivo? ¿Se ha reducido el número de operaciones en efectivo?
R No, España es el país del efectivo, el volumen de billetes en circulación es asombroso. Lo que se hace es que se fraccionan: lo hago en dos veces o me pones la mitad a mí y la mitad a mi mujer. También hay menores que compran casas.
P ¿Es real la imagen de un señor cruzando la frontera con una bolsa de deporte llena de dinero?
R Sí, es real y situaciones más rocambolescas. Y fíjese que en España el Gobierno se vio obligado a poner una serie de medidas para atajar el terrorismo de ETA, como el decreto por el que un policía puede incautar el dinero a quien vaya por la calle con 100.000 euros. A pesar de eso, los viajes a Suiza o Andorra con la mochila son reales, y más con las fronteras abiertas. No hablo de gente adinerada, hablo de un gestor que tenía dinero en efectivo, por ejemplo.
