El Gobierno está a punto de aprobar el endurecimiento de las medidas de seguridad en las naves industriales para evitar que se repitan incendios como el de febrero de Indukern en Fuente del Jarro, que causó daños en seis empresas. El incendio de Fuente de Jarro se inició tras una reacción química, que es precisamente lo que busca atajar la normativa. La regulación obliga a almacenar de forma segura los bidones de menos de 3.000 litros, autoriza los contenedores móviles ignífugos y unifica el etiquetado de los productos peligrosos.

El ejecutivo lleva siete años trabajando en la normativa, que sustituirá a la regulación en vigor desde 2001. Carolina García, gerente de la empresa Denios España y miembro de la comisión de Industria del Ministerio que ha trabajado en la nueva regulación, explicó que la normativa actual es «muy farragosa y difícil de aplicar para la mayoría de las empresas».

El 90 % de la industria española tiene algún tipo de producto peligroso. En València se producen de media cien incendios al año porque la mayoría de las empresas almacena los productos químicos en bidones de forma inadecuada y sin identificar, según precisó la gerente de Denios (que es una empresa especializada en productos de seguridad industrial).

El cambio más importante de la normativa es que obliga a almacenar de forma segura los bidones, garrafas o botes con productos químicos de menos de 3.000 litros. «Esto es muy importante porque estos recipientes son los más peligrosos y donde suele iniciarse el accidente. Hasta ahora, los bomberos desconocen dónde están este tipo de recipientes al no aparecer en el plan de seguridad», subrayaron desde Denios.

Edificio de obra

Una segunda novedad encaminada a facilitar la seguridad de las empresas es que ya no hará falta construir un edificio de obra para el almacenamiento (con el coste que eso supone) sino que se autorizan los contenedores móviles ignífugos. Estos contenedores tienen un coste mucho menor y son más fáciles de integrar en cualquier espacio.

La nueva norma unifica el etiquetado de productos peligrosos de Estados Unidos y de la Unión Europea para que los importados sean fácilmente identificables.

Carolina García insistió en la necesidad de mejorar la seguridad en las naves industriales porque cada día se producen en España tres incendios de importancia. «El incendio de Fuente del Jarro confirmó que era necesario aumentar la seguridad. El problema es la dispersión de los pequeños recipientes», subrayó. El incendio de Fuente del Jarro arrasó tres naves industriales y afectó a otras tres parcialmente. El fuego se inició en la empresa de distribución de productos químicos Indukern cuando un operario se encontraba manipulando acetona. Uno de los tanques de Indukern salió despedido ochenta metros.

Según Denios (que es el único fabricante que está en la comisión de Industria del Ministerio), el 20 % de las empresas que sufre un incendio acaba destruida y el 70 % cierra en cuatro años.