El objetivo es penalizar a aquellas empresas que no imparten formación a sus trabajadores para forzarlas a seguir ese camino, pero es innegable que también es una fórmula para vincular a las mercantiles con sus respectivas asociaciones representativas. Y es que el acta del principio de acuerdo del convenio colectivo provincial para la industria y servicios del metal de València, suscrito el pasado 27 de julio por los sindicatos UGT-PV y CC OO-PV y por la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval), incluye una cláusula por la que las compañías que operan en esta actividad y que no están asociadas a la citada patronal o a las organizaciones que la integran, «deberán abonar a sus trabajadores un plus compensatorio de formación, de naturaleza salarial, en cuantía de 25 euros mensuales, durante la vigencia del presente convenio», que se extiende entre 2017 y 2019.
La citada cláusula establece una vía para lograr la acreditación que permita a la empresa eludir el citado plus: obtener un certificado expedido por la patronal o por los sindicatos que muestre que dicha mercantil ha participado en algún plan formativo desarrollado por alguno de esos agentes sociales. Las certificaciones tendrán una validez de un año, aunque podrán ser renovadas automáticamente.
El secretario general de Femeval, Alejandro Soliveres, explicó ayer a este diario que lo firmado es solo un principio de acuerdo y que tanto la patronal como los sindicatos se emplazaron para darle la redacción definitiva a la vuelta de vacaciones. Así que será entonces cuando se cierre y también cuando se establezca, tras debatirlo con los sindicatos, la fórmula para que las empresas asociadas a Femeval también acrediten que dan formación.
Penalización
Soliveres explicó que el objetivo del citado artículo no es que las empresas se asocien a la patronal, sino forzarlas a todas a que impartan formación. En Femeval, añade, «tenemos constancia de que la inmensa mayoría de nuestros afiliados hacen formación; de los que están fuera no lo sabemos». De ahí esa «penalización para forzarlas» a dar cursos. El secretario general de la patronal del metal precisó que esta fórmula ya figura en otros convenios sectoriales de España. Soliveres añadió que el número de parados está bajando, pero «determinadas empresas precisan personal cualificado y no lo encuentran». De hecho, el convenio cifra como propósito «facilitar una formación ajustada a las necesidades del mercado de trabajo que atienda a los requerimientos de competitividad de las empresas de este sector, a la vez que satisfaga las aspiraciones de promoción profesional y desarrollo personal de los trabajadores, capacitándoles para el desempeño cualificado de las diferentes profesiones».
