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Proyecto

Dos biólogos valencianos impulsan en Ibiza una de las primeras granjas de lenguado

El proyecto contempla una inversión de 4,3 millones en una instalación ubicada en tierra por las particularidades de la especie

Dos biólogos valencianos impulsan en Ibiza una de las primeras granjas de lenguado

Los biólogos valencianos Joan Blasco y Pep Martínez proyectan la construcción de una piscifactoría de cría y engorde de lenguado en la isla de Ibiza. Se trata de un proyecto, de la mano de otros dos socios locales, que contempla una inversión de 4,3 millones entre tecnología, compra de terrenos y construcción de la nave. Será la primera en la isla de Ibiza, y una de las pocas que hay en España, enfocada hacia esta especie, apenas cuatro en Andalucía y Galicia. En la Comunitat Valenciana, por ejemplo, donde existe de lubina y dorada, no hay ninguna de lenguado.

Según explica Blasco, la mercantil Granja Marina d´Eivissa proyecta una instalación en tierra, y eso está generando algunos problemas. La zona prevista se encuentra en el área de influencia del parque natural Ses Salines, en dos parcelas contiguas de unos 28.000 metros en total, cerca del aeropuerto de Ibiza.

El proyecto se encuentra todavía en el principio del trámite administrativo. La cercanía al parque y la presión urbanística sobre una isla de gran atracción turística hace que las autoridades sean especialmente sensibles a estos proyectos. En unos días los promotores prevén presentar al Consell Insular el proyecto ajustado a algunos requerimientos de las autoridades para ajustarse a la ley.

Según explica Joan Blasco, biólogo establecido en Ibiza tras una trayectoria de una década en la acuicultura valenciana, la granja contempla dos líneas de producción: una de cría y desarrollo larvario, y otra de engorde de los alevines hasta una talla de comercial de 500 gramos, con capacidad para 120 toneladas de lenguado al año.

La actividad productiva se basa en la cría y engorde del lenguado en tanques, dentro de una nave, y con un circuito cerrado de agua salada. El agua salada para abastecer la instalación se prevé obtener de una perforación a unos 200 metros del mar. Las instalaciones de engorde constan de 300 tanques en diferentes alturas. En esas bañeras los peces pasarán de 10 gramos hasta los 400-500, en que llegan a la talla comercial.

¿Qué interés tiene montar una granja de lenguado, una especie que apenas ha entrado en el circuito de la acuicultura? «La acuicultura de lenguado no ha terminado de establecerse dentro del sector, concretamente por el tipo de especie. El hábitat y la costumbre de esta especie no permite la cría en jaulas en el mar con la actual tecnología, con lo que su producción se tiene que desarrollar en tanques en instalaciones en tierra. Y la necesidad de espacio cercano a la línea de costa es uno de los cuellos de botella que frena las iniciativas empresariales», explica Blasco.

«El negocio está gestándose en estos momentos. Es una especie que tiene mercado. Tiene posibilidades de competencia con el producto fresco por su menor coste de producción/captura», señala.

Según los datos de Blasco, el precio de venta de estos ejemplares criados en cautividad se sitúa en 13/14 euros el kilo, frente a los 24 que alcanza el lenguado salvaje, además de ser considerablemente más grande (hasta medio kilo frente a los 200 gramos de media).

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