La Unió de Llauradors ha pedido «regionalizar» el reparto de nuevas autorizaciones para plantaciones de viñedos, de forma que cada comunidad autónoma disponga de su cupo del 1 por ciento sobre su superficie de viñedo como mejor se adecue a su política vitivinícola, tras constatar que la Comunitat Valenciana ha perdido más de 18.691 hectáreas en 15 años, a razón de más de 1.250 por campaña. La Comunitat cuenta con 65.000 hectáreas de potencial vitícola tras las pérdidas indicadas.

La Unió se ha felicitado este lunes por la inclusión de algunas de sus sugerencias en la modificación del sistema de concesión de autorizaciones para nuevas plantaciones de viñedo, pero ha considerado que «Aun se dejan de lado» cuestiones «importantes» como la regionalización del cupo de autorizaciones y el establecimiento de un límite de hectáreas a conceder por solicitante y año.

Reglamento comunitario

Según la organización agraria que lidera Ramón Mampel, estos y otros cambios mejoran en su conjunto el sistema de autorización de nuevas plantaciones aunque, en su opinión, aún se deberían introducir correcciones tanto en la reglamentación comunitaria como en la normativa estatal, en beneficio de los viticultores y para evitar repartos asimétricos, deslocalización del viñedo en ciertas zonas y pérdidas del potencial productivo en la diferentes áreas productoras de viñedo implantadas historicamente en la Comunitat Valenciana.