El futuro inmediato en el transporte pasa por los vehículos híbridos ante la necesidad de reducir las emisiones de CO2 y la concentración de partículas NOx que hace el aire irrespirable. En los últimos años se han popularizado los coches híbridos con motores eléctricos y de gasolina, pero la mayoría de conductores desconoce que existe una alternativa con los vehículos que combinan la gasolina y el gas natural. Más de un millón de personas tienen en Italia este tipo de vehículos propulsados a gas y en España comienzan ahora a abrirse paso. Un grupo de expertos coincidió ayer en una mesa organizada por Gas Natural Cegas y Levante-EMV sobre energía y calidad del aire en las ventajas de los vehículos híbridos propulsados a gas.

En la mesa intervinieron Elena Cebrián, consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural; Rubén Alfaro, presidente de la Federació Valenciana de Municipis i Províncies; Nuria Rodríguez, directora de Negocio Distribución Gas España; y Antonio Calvo, responsable de Movilidad Sostenible de Seat. El debate estuvo moderado por Julio Monreal, director de Levante-EMV.

Los participantes en la mesa incidieron en los problemas para la salud pública que provocan las emisiones derivadas del petróleo o el carbón (en el caso de las calefacciones). La consellera de Medio Ambiente subrayó que la mayor preocupación de la Administración son las emisiones de CO2 por su impacto en la capa de ozono y la concentración de partículas NOx en las grandes ciudades por los motores de combustión tradicional. Elena Cebrián lamentó que España está muy lejos de conseguir cumplir los objetivos del programa establecido por la Unión Europea para que los países miembros reduzcan en el año 2020 un 20 % el consumo de energía primaria, un 20 % las emisiones de CO2 y que las renovables supongan una contribución de la energía total consumida del 20 %.

En este contexto surge como alternativa real el gas natural. La directora de Negocio Distribución Gas España explicó que el uso del gas natural «es determinante para mejorar la calidad del aire». Nuria Rodríguez señaló que el gas natural es el combustible convencional con menos emisiones de CO2 y partículas contaminantes, su precio es estable y el suministro está garantizado por las redes de distribución subterráneas de la Comunitat Valenciana y España. «La transformación para el uso de energías menos contaminantes no tiene marcha atrás», sentenció.

La directiva insistió en que en el caso del transporte la introducción del gas natural «contribuye a reducir la contaminación y mejora la calidad del aire». La utilización de gas natural vehicular (el adaptado para los motores) supone «una reducción del 100 % de las emisiones de NO2, del 85 % de las de óxido de nitrógeno y de más del 95 % de las de partículas sólidas», puntualizó Nuria Rodríguez.

El responsable de Movilidad Sostenible de Seat añadió que «hoy en día es una realidad la posibilidad de utilizar turismos híbridos impulsados a gas natural» por el mismo precio que los de gasolina. «En Seat comercializamos un León TGI (de gasolina) por el mismo precio que el propulsado por gas natural», señaló Antonio Calvo. El directivo de Seat aseguró que «tienen las mismas características de potencia» y el ahorro en consumo «es muy alto» ya que «con 200 euros se pueden recorrer 6.000 kilómetros». Calvo destacó que un coche a gas consume «un 50 % menos» que uno de gasolina y «un 30 % menos» que un diésel.