Golpe de efecto de la -hasta ahora- patronal alicantina. La asamblea general de Coepa votará el próximo martes una modificación de sus estatutos para cambiar su ámbito de actuación de provincial a autonómico y optar así a las ayudas de la Ley de Participación Institucional que concede el Consell, además de mantener la representación en los principales organismos públicos. Es la respuesta de Francisco Gómez y de su equipo ante el bloqueo o, más bien, la inexistencia de negociaciones para incorporarse el proyecto de la CEV, por la negativa de los valencianos a reconocer el papel de Coepa como portavoz del empresariado alicantino y su intención de sustituirlo por un comité interno que realice esta misma tarea.

De esta forma, a partir de ahora ambas organizaciones competirán por estas ayudas y también por designar a los representantes de las patronales en los distintos foros de participación social y en otras instituciones, como los plenos de las Cámara de Comercio, que acaban de convocar sus elecciones. En el caso de Alicante, las patronales nombran a ocho de sus miembros.

Eso sí, antes Coepa deberá obtener el reconocimiento de la Generalitat como una de las "entidades más representativas" de la autonomía aunque, según las fuentes consultadas, fueron los propios responsables de la Conselleria de Economía los que les instaron -o más bien retaron- a dar el paso, ante las quejas de los alicantinos por los nombramientos que ya había realizado la CEV en diversas instituciones, como el Observatorio Autonómico de la Industria o el Tribunal de Arbitraje Laboral. Unas designaciones que, en la práctica, estaban dejando aislada a patronal alicantina.

Coepa necesita los ingresos de la Ley de Participación Institucional, al menos temporalmente, para sacar adelante el convenio que le permitió salir del concurso.