La bolsa española se depreció un 0,4 por cientos en su cuarta jornada consecutiva a la baja, afectada por las pérdidas del sector financiero en Europa, según datos del mercado.

Con esta caída el principal índice selectivo español, el IBEX 35, encabezó los descensos europeos al restar 41,30 puntos, hasta quedar en 10.316,50 puntos, con lo que reduce al 10,31 % las ganancias acumuladas del año.

En Europa se supo que los precios de producción industrial se elevaron seis décimas en septiembre tanto en la zona euro como en el conjunto de la Unión Europea, lo que supone que en tasa interanual crecieron el 2,9 % en los países del euro y el 3,3 % en los Veintiocho, según datos de Eurostat.

El resto de plazas europeas acabaron la sesión de forma diversa ya que Londres ganó el 0,03 %, mientras que París perdió el 0,19 %; Fráncfort el 0,07 y Milán el 0,05.

En Asia dominó la tendencia positiva y el CSI, que agrupa a las 300 mayores empresas de Shanghái y Shenzhen, subió el 0,71 % y Tokio el 0,04 %, mientras que Hong Kong perdió el 0,02 %.

La apertura dubitativa de Wall Street, tras los máximos históricos que marcó el viernes, ha contribuido a mantener los descensos en el IBEX.

En este índice la mayoría de las grandes compañías terminaron a la baja: Santander un 1,23 %; BBVA el 0,94; Inditex el 0,85; Telefónica el 0,66 y Repsol el 0,53, mientras que Iberdrola se apreció el 0,29 %.

Tras el Santander, Grifols fue el valor más bajista del IBEX, al caer el 1,22 %, mientras que Amadeus repuntó el 2,40 %, beneficiada por recomendaciones favorables tras presentar sus cuentas la pasada semana.

El precio del crudo de referencia europea, el Brent, se elevaba un 2,5 % hasta 63,61 dólares, después de que el régimen saudí (uno de los principales exportadores) detuviera a varios príncipes y políticos acusados de corrupción y tras conocerse el lanzamiento de un misil desde Yemen.

El euro se depreciaba hasta 1,159 dólares al cierre del parqué español, en el que hoy se negociaron 2.300 millones de euros.