El año que viene está previsto que el Gobierno retome una mejora de las pensiones de viudedad que fue aprobada en 2011 y que se bloqueó por las dificultades que atravesaban las arcas públicas. La reforma consiste en un aumento del 52 % al 62 % la proporción de la base reguladora que se aplica para fijar la cuantía de la prestación. Los requisitos para la aplicación de este incremento hará que únicamente un tercio de las personas que cobran un pensión de viudedad vean aumentada su paga puesto que los beneficiarios serán los que cobran la pensión mínima del sistema y que carecen de otros ingresos. En la Comunitat Valenciana únicamente el 35 % de los pensionistas (86.245) cumple las condiciones.

Aunque aún quedan muchos detalles que perfilar, el Ministerio de Empleo y seguridad Social prevé tener listo antes de final de año el reglamento que desarrollará el cambio en las pensiones de viudedad. Entre los aspectos a regular se determinará si la subida entrará en vigor de una vez o de forma gradual en varios años. Aunque en las previsiones del año 2011 estaba contemplado que el aumento se llevara a cabo conforme a la última opción, el retraso de varios años en su aplicación, abriría la puerta a que el incremento se hiciera de golpe.

La mejora de las pensiones de viudedad está asociada a un perfil muy concreto: personas mayores de 65 años, que no reciban otra prestación, que no trabajen por cuenta ajena o propia y que sus ingresos por todos los conceptos no superen los límites establecidos para tener derecho a la pensión mínima de viudedad. Así pues el cambio se concentrará en las viudas y viudos que cobran el llamado complemento mínimo (un plus que abona el Estado hasta alcanzar la pensión básica del sistema, 638 euros al mes para los mayores de 65 años) cuando el historial de cotización del cónyuge fallecido no lo permite por sí mismo.

Aunque también existen 'peros' para este grupo: los pensionistas tendrán un incremento por un lado (al llegar al 60 % de la base reguladora), pero por otro lado se les retirará todo o parte del complemento. A final de cuentas, lo que se pague de más con cargo a las cotizaciones a la Seguridad Social, se ahorrará en los complementos mínimos que son financiados con los impuestos.

La reforma excluye en primer lugar a las viudas con cargas familiares, porque para ellas la pensión ya es equivalente al 70 % de la base reguladora. Quedan fuera también las viudas que a la vez cobran pensión de jubilación (cobrar dos prestaciones es posible mientras no se superen ciertos topes) y las que trabajan, cualesquiera que sean sus ingresos por el empleo (trabajo y viudedad son legalmente compatibles).

Cifras en la Comunitat

En la Comunitat Valenciana hay un total de 241.856 pensionistas de viudedad, de ellos unos 86.245 cobran las pensiones mínimas legales. Entre estos últimos estarán los beneficiarios potenciales de los cambios contemplados por la cartera que dirige Fátima Báñez.

Con respecto a la cantidad percibida por viudedad, ninguna de las tres provincias valencianas alcanza la media española, que se sitúa en 647,80 euros. En el caso de Alicante, la media de ingreso con motivo de pérdida de cónyuge se establece en 596, 35 euros. En el caso de Castelló, la cifra es la menor de las tres al situarse en los 583,33 euros, mientras que la de València es de 632,15 euros.

En relación a la cantidad de personas que perciben esta ayuda, el desglose pone de manifiesto que en Alicante son 79.168 los beneficiarios. En Castelló son 30.048 y en València más de 132.600 viudos y viudas reciben esta ayuda.

614 euros: media de las pensiones en la Comunitat Valenciana

La media de las ayudas recibidas por los valencianos no alcanza el promedio nacional que es de 647 euros mientras que en la Comunitat es de poco más de 614 euros.