El juzgado de lo Mercantil número 1 de Valencia ha declarado el concurso voluntario de acreedores de Transportes Zariñena, firma valenciana especializada en el transporte de frutas y hortalizas a través de camiones frigoríficos, tras arrastrar un pasivo total de 8,07 millones de euros (5,9 millones de deuda corriente y 1,98, no corriente), según constatan las cifras de su balance correspondiente al ejercicio de 2016.

La compañía valenciana con sede en Massamagrell y que tiene como socio único a Servipol, compañía de servicios logísticos, concluyó el año 2016 con unas pérdidas de 959.912 euros, «números rojos» que contrastan con los beneficios logrados durante los años anteriores. En 2016 consiguió una cifra de negocio de 13,08 millones, frente a los 11,87 del año precedente.

Pese a la grave situación financiera, Transportes Zariñena, mantiene su actividad y entre sus clientes se encuentran grandes firmas del ámbito de la distribución comercial como Mercadona. Además, presta servicios a exportadores citrícolas como Fontestad, una de la firmas líderes en el comercio privado naranjero.

Competencia en el sector

El transporte terrestre de mercancías es un sector muy atomizado en la Comunitat Valenciana, donde las mayoría de su tejido empresarial son pymes. La corporación que dirige Carlos Cernuda ha renovado recientemente 18 cabezas tractoras MAN para realizar tráficos internacionales, que han iniciado sus rutas hacia Suiza. La operación cuenta con la participación de MAN Financial Services e incluye un contrato de mantenimiento y reparación. El grupo Transportes Zariñena lleva 15 años en el sector del transporte, si bien ya cuenta con algo más de cuatro décadas de experiencia en negocio, que es cuando el fundador de esta empresa familiar comenzó su actividad profesional como trabajador autónomo.