El titular del juzgado de lo Mercantil número dos de València, Javier García-Miguel Aguirre, ha declarado en concurso de acreedores voluntario a la empresa Precocinados Tía Teresa de Massamagrell. La compañía ha solicitado la suspensión de pagos para tratar de reestructurar sus deudas tras haber cambiado a toda la plantilla, según confirmaron fuentes de la firma. Los anteriores trabajadores encadenaron huelgas y protestas por el impago de las nóminas. Este periódico intentó ayer sin éxito obtener la versión de algún responsable de la compañía.

La firma de precocinados, frescos y elaborados frescos continúa con su actividad con veinte trabajadores, pero ninguno de ellos es de los antiguos empleados. La empresa ha pasado en los últimos dos años y medio de contar con medio centenar de trabajadores hasta la veintena actual y con un problema de financiación. Los responsables de la compañía, como ha venido informado Levante-EMV, acusaban a los miembros de la anterior plantilla de querer hundir la empresa con las huelgas que iniciaron por no cobrar. La empresa llegó a contratar a más personal durante el paro.

El titular del juzgado de lo Mercantil número dos de València ha nombrado como administrador concursal a Enrique Calatayud Bonilla y ha declarado la intervención de la administración de la empresa mientras dura el concurso de acreedores.