El pleno del Congreso ha dado luz verde a la reforma de la ley del concierto económico vasco y la nueva metodología de señalamiento del cupo para el quinquenio 2017-2021, de 1.300 millones de euros.

La revisión del cupo ha salido adelante con el voto a favor del PP, el PSOE, Unidos Podemos y PNV, mientras que Ciudadanos y Compromís se han opuesto y EH Bildu se ha abstenido.

Ambos proyectos son fruto del acuerdo alcanzado en julio en la Comisión Mixta del Concierto Económico, después de que el PNV apoyara los Presupuestos Generales del Estado para este año. Los nacionalistas vascos también respaldaron luego el techo de gasto para 2018.

El cupo es la aportación que hace Euskadi cada año a las arcas comunes del Estado por las competencias no transferidas al Gobierno autonómico, como infraestructuras (aeropuertos, puertos, ferrocarriles), defensa y representación exterior, cuya cuantía se determina en leyes quinquenales pactadas por los dos gobiernos.

La principal novedad de su revisión es que se fija el cupo base para el año 2017 en 1.300 millones de euros, sin considerar la cantidad derivada de la participación del País Vasco en los créditos presupuestarios del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha censurado hoy el concierto económico y el cupo vasco, que ha calificado de "cuponazo" y "amaño político", mientras que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha negado agravios y le ha acusado de llevar al enfrentamiento entre españoles ante el 21D.

El presidente de Ciudadanos ha asegurado que no estaba discutiendo de la existencia del concierto ni la foralidad, sino de cómo se calcula el cupo, cómo se gestiona y cómo se llegar a acuerdos para decidir la aportación.

"Y este es el problema, que no es del concierto, sino del cuponazo, que no responde a un cálculo técnico sino a un amaño político", ha sentenciado. Según Rivera, el concierto y el cupo no garantizan la solidaridad y la igualdad entre españoles, sino que inciden en la insolidaridad territorial, y son un "fraude" a la Constitución, que reconoce la foralidad, pero que en su artículo 138 habla de que ninguna comunidad puede tener ningún privilegio.

Rivera ha ofrecido algunos datos en su intervención y ha apuntado que mientras la Comunidad de Madrid aporta 19.205 millones a la solidaridad territorial, Cataluña otros 9.892 millones y la Comunidad Valenciana unos 1.700, el País Vasco recibe 3.387 millones.

Montoro ha replicado a Rivera para pedirle respeto a la hora de exponer sus diferencias políticas, "más allá de epítetos y calificativos", y ha enmarcado el duro tono del líder de Ciudadanos en la campaña electoral para los comicios del 21 de diciembre en Cataluña. Pero, según el ministro, "ciertos calificativos sobran, ciertos enfrentamientos entre ciudadanos sobran; sobra el énfasis en agravios comparativos".

Ha recalcado que las distintas haciendas se han desarrollado en los últimos 40 años desde la pluralidad y ha incidido en que el debate de hoy en el Congreso sobre el cupo vasco supone precisamente un "reconocimiento de la pluralidad, no la identificación de privilegios".

Montoro asegura que el cupo vasco no tiene que ver con la negociación de los PGE

Montoro asegura que el cupo vasco no tiene que ver con la negociación de los PGE

Montoro asegura que el cupo vasco no tiene que ver con la negociación de los PGE. Vídeo: Agencia ATLAS/Foto: EFE

Nuevo modelo de financiación autonómica

Montoro ha desvinculado hoy la aprobación del nuevo cupo vasco a un apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado de 2018 y ha afirmado que son "cosas completamente diferentes". En declaraciones a los medios de comunicación en el Congreso, Montoro ha explicado que se trata de leyes acordadas y pactadas el pasado verano.

Montoro ha reiterado que dado el retraso en la aprobación de los próximos Presupuestos Generales del Estado, éstos deberían incluir en nuevo modelo de financiación autonómica y ha apelado a los presidentes de las comunidades gobernadas por el PSOE a que avancen con esta negociación.

"La idea del Gobierno es que ya que están retrasados los presupuestos, nos parecía ideal que incorporaran la reforma de la financiación autonómica, y poder ser capaces de llevarla adelante", ha aseverado.

En este sentido ha recordado que fue el PSOE el que propuso en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que en 2017 estuviera listo el nuevo modelo de financiación a sabiendas de que debería ser canalizado en los presupuestos.

Ha señalado que este viernes se conocerá la fecha de la próxima reunión del CPFF, cuyo Comité Técnico está elaborando un informe sobre financiación autonómica que en diciembre contrastará con las comunidades autónomas y los partidos políticos, especialmente con el PSOE.