La compañía valenciana Embutidos Martínez, que es interproveedora de la cadena Mercadona, ha ampliado su objeto social para incrementar su capacidad de investigación. El nuevo objeto social incluye la «elaboración, estudio, diseño y ejecución de proyectos de base tecnológica» y la «ejecución de proyectos orientados al fomento de la innovación y el desarrollo empresarial». Fuentes de la compañía explicaron que la innovación está en el ADN de la empresa y precisaron que están estudiando proyectos, pero todavía no tienen ninguno cerrado.

La empresa cerró 2016 con una cifra de negocio de 111,88 millones de euros, sin apenas cambios respecto al año anterior (111.28 millones). La compañía confía en acabar 2018 con unas ventas de 124 millones y unos beneficios de 10 millones.

A lo largo de los últimos años, la rentabilidad de la compañía antes de impuestos se ha mantenido en el entorno de diez por ciento de ventas continuadas.

Embutidos Martínez pertenece a la familia de su presidente, Francisco Martínez, a través de la sociedad Torrent Fimer. Su sede social y oficinas están en Cheste, donde tiene uno de los centros de producción. Además, también dispone de plantas en las localidades valencianas de Buñol y Torrent. La empresa trabaja prácticamente en exclusiva para Mercadona.

La empresa valenciana tiene capacidad para producir 35 millones de kilos de productos, de los que 17 millones son de embutido y 18 millones de carne picada y hamburguesas.

Francisco Martínez también se dedica a la actividad inmobiliaria a través de la firma Valencia Bussines Building.