La economía no es una ciencia exacta. Mucho menos a la hora de hacer previsiones. Y es que su evolución está sujeta a un sinfín de imponderables. BBVA Research hizo a principios del pasado octubre el pronóstico de que el PIB valenciano crecería un 2,7 % en 2018. Un mes más tarde, a resultas de la deriva independentista en Cataluña, redujo ese porcentaje en tres décimas y lo dejó en el 2,4 %. Ayer, en la presentación del informe «Situación Comunitat Valenciana», el servicio de estudios del banco mantuvo el augurio, pero con muchos matices, tantos que ese 2,4 %, similar al del conjunto de España y al que se registraría en 2019, podría crecer hasta el 2,8 % o incluso el 3 %, si se mantienen los factores que han propiciado una aceleración en el primer mes del año.

Aún así, la entidad considera que, tras un 2017 en que subió un 3,2 %, «la incertidumbre derivada del entorno político en Cataluña podría restar entre tres y cuatro décimas al PIB valenciano en 2018, siendo una de las autonomías más expuesta».

El responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech, explicó que, a pesar de todo, muchas de las incertidumbres de noviembre «no se han materializado» y por eso «no es descabellado volver a la previsión para València de hace seis meses», es decir, un 2,7 %, dado que algunos datos de principios de año, como la afiliación a la Seguridad Social, indican que la Comunitat Valenciana podría crecer en el primer trimestre siete décimas y acabar el año en el 2,8 %. O incluso llegar al 3 %. En cualquier caso, será un porcentaje inferior al de 2017 por dos indicadores que crecen menos: la demanda interna y el turismo.

El escenario que maneja el servicio de estudios del BBVA, en cualquier caso, apunta a que al finalizar 2019 se habrá recuperado en la autonomía el nivel de PIB per cápita que había antes de la crisis, lo que implica que la Comunitat Valenciana ha perdido una docena de años. En términos de empleo, la situación es peor. Aunque la entidad financiera augura que entre este ejercicio y el próximo la autonomía será capaz de crear 100.000 puestos de trabajo, la tasa de paro seguirá en el 13,3 % al final del bienio, seis puntos por encima de la que había antes de la crisis.

Mejor prorrogar las cuentas

Doménech destacó como riesgos locales que la celebración de elecciones autonómicas y municipales en 2019 relajen el gasto público y las dudas sobre la aprobación este año de los Presupuestos Generales del Estado. Respecto a esta última cuestión, el también profesor de Economía en la Universitat de València aseguró que una prórroga podría acelerar el cumplimiento del déficit público. Sobre las pensiones afirmó que «no hay que revertir las reformas en las pensiones» y abogó por reformar el mercado de trabajo para elevar los ingresos de la SS.