Unión Gremial podría volver a su antigua casa. La asociación del pequeño comercio enfrentada desde hace 25 años a la patronal autonómica ha sido citada por el presidente de la CEV. Y el motivo no es otro que negociar la reintegración de los comerciantes en el nuevo proyecto empresarial autonómico que lidera Salvador Navarro.

Unión Gremial, que cuenta con una representación del 45% del comercio de la provincia de València, según la conselleria, rompió con el universo de la CEOE a principios de los 90. Se salió de la entonces patronal provincial CEV al entender que siempre se imponía el criterio de las grandes superficies.

De aquella fuga surgió otro proyecto, L´Empresarial, que trató de hacer la competencia a la autonómica Cierval. No prosperó, pero Unión Gremial se mantiene desde hace 25 años fuera del cobijo de la gran patronal. Con la liquidación de Cierval y la conversión de la CEV en autonómica, Salvador Navarro está tratando de recomponer las antiguas alianzas.

El comercio es uno de los sectores con más cicatrices. De momento, la confederación de asociaciones Covaco acaba de integrarse en la CEV. Allí convive hoy con la otra confederación autonómica del sector, Cecoval, que fue fundada desde el seno de la propia CEV en 2007 precisamente para contar con representación en este sector.

Una y otra, Covaco y Cecoval, negocian ahora la integración en una única entidad para agrupar al grueso del comercio valenciano.

Para cerrar el círculo, Salvador Navarro aspira a que Unión Gremial regrese también a la CEV. La entidad, según ha podido comprobar este diario, estaría dispuesta. El encuentro se producirá a finales de marzo, después de la asamblea de la CEV del día 22 que elegirá a la nueva junta directiva.

La entidad gremial, precisamente, celebró la noche del miércoles su asamblea anual, que ha renovado a la mitad de la dirección. La organización cerró 2017 con una deuda de 125.495 euros. Corresponde a parte del préstamo hipotecario al que tuvo que recurrir hace unos años ante las deudas de la Generalitat.

38.000 euros en cuotas

Para 2018 ha presupuestado unos ingresos de 181.000 euros, de los que 115.000 corresponden al convenio con la Generalitat y 38.000 euros, a cuotas de los asociados. Tiene cerca de 90.000 euros pendientes de cobro de la Generalitat. En 2017 se unieron a Unión Gremial entidades de Albalat dels Tarongers, Bonrepós i Mirambell, Sedaví o Picassent. En 2018 se han unido asociaciones de Sueca, Silla, Cullera y Museros, y está previsto que se sumen seis más.