Las grandes fortunas valencianas adaptan sus patrimonios a la era postcrisis y a los nuevos hábitos económicos y sociales. La familia Noguera Borel, con intereses sobre todo en la inversión financiera y el negocio inmobiliario, ha decidido reordenar su actividad de explotación de fincas rústicas: abandonará la actividad citrícola y se dedicará al arrendamiento de espacios para usos turísticos, de ocio y restauración.
La saga de los Noguera Borel, que mantiene un bajo perfil público, está integrada por Agnés Borel Lemonnier y los hijos que tuvo con el fallecido Álvaro Noguera: Agnés, Alejandro y Pablo Noguera Borel. La familia cuenta con dos grandes fincas en Massarrojos, Masía del Carmen y Masía del Francés, que tradicionalmente se dedicaban a la actividad agrícola. El grupo de edificaciones incluidas en la Masía del Carmen, del siglo XVIII, se reconvirtió en 2015 en un espacio para eventos sociales, restauracio?n y catering, sobre todo bodas, con capacidad para un máximo de 400 personas.
Alquiler
Los Noguera arrendaron la Masía del Carmen a una empresa especializada, Gourmet Catering & Espacios, que se encarga de su explotación durante diez años (hasta 2025) y que paga a la familia un precio fijo anual y otro variable en funcio?n del volumen de facturacio?n del recinto. Gourmet Catering & Espacios, fundada en València en 1957 y cuyo director general es Santiago Cabello, organiza enventos en otros recintos, como La Cartuja, el Palacio de Marqueses de Malferit o Los Toros, en el Palau de Les Arts.
La Masía del Francés, por el contrario, se mantenía hasta ahora como punto de actividad agrícola, sobre todo de cultivo de cítricos.
Sin embargo, ante el bajo rendimiento que obtiene la familia de este negocio, se ha acordado mantener las plantaciones de la finca en mínimos y seguir los mismos pasos que con la Masía del Carmen. De este modo, los Noguera pretenden alcanzar un futuro acuerdo de arrendamiento operativo de la Masía del Francés para su uso turi?stico, de ocio y restauracio?n, según explican fuentes conocedoras del proceso.
La familia valenciana confia en la recuperación de la economía española, después de la crisis, y en la previsible reactivación del consumo. Esta tendencia impulsaría el gasto en eventos y actos turísticos, lo que permitiría a los Noguera Borel rentabilizar las inversiones realizadas en las principales edificaciones de las dos masías de Masarrojos.
La explotación de fincas rústicas es una de las actividades de los Noguera, que agrupan en la sociedad cotizada Libertas 7 el grueso de sus negocios: inversiones financieras (participaciones en empresas privadas y en sociedades cotizadas en bolsa), actividad inmobiliaria (sobre todo promoción de viviendas, a través de Ficsa) y arrendamientos (fincas agrícolas e inmuebles turísticos y urbanos).
Prisa y Adolfo Domínguez
Las inversiones financieras de la familia valenciana incluyen participaciones en empresas como el grupo de medios de comunicación Prisa (0,36 % al cierre de 2017) y la empresa textil Adolfo Domínguez (10,22 % a 31 de diciembre de 2017). También están presentes en otras empresas como Finanzas e Inversiones Valencianas. Mesdalt, Fortis Valora, el Portal de Valldigna, Luxury Liberty, y Cleop, entre otras.
Por su parte, en el área inmobiliara, los Noguera se centran sobre todo en la promoción de viviendas y en la explotación de inmuebles en régimen de alquiler. Las viviendas, primeras residencias destinadas a clientes de rentas medias, están en la Comunitat Valenciana y se desarrollan sobre suelos finalistas. Los inmuebles en régimen de alquiler son viviendas, oficinas y locales comerciales. Estos activos, valorados en libros en más de 23 millones de euros, se encuentran en Port Saplaya (edificios vacacionales) y en València (viviendas y locales). En Port Saplaya explotan, por ejemplo, 76 apartamentos, con 410 camas, en primera línea de playa. Parte de estas propiedades están hipotecadas en garantías de préstamos.
La gestión ejecutiva de Libertas 7 está pilotada por su consejera delegada, Agnés Noguera Borel,y por otros dos ejecutivos, responsables de las áreas de inversiones (Jorge Pérez Antolí) e inmobiliaria (José Tormo López). En el consejo de administración se sienta la consejera delegada, su madre (presidenta), sus dos hermanos (Alejandro y Pablo) y tres independientes: Rafael Fraguas, Carlos Pasqual y Víctor Casas.
