P Su nombramiento ha supuesto la rotura de un techo de cristal.
R Sí, soy la primera mujer que ha llegado a la presidencia. De todas formas, los registradores siempre nos han visto como compañeras. No habido nunca problemas y este cambio se ha producido con naturalidad.
P ¿Cuándo accedieron al Registro las primeras mujeres?
R Las primeras registradoras son del año 1941. Fueron cuatro. Sin embargo, en 1945 se eliminó el acceso de la mujer a profesiones como la judicatura o el Registro. Los legisladores decían que si no eliminaban el acceso se iba a convertir en un cuerpo femenino. Solo se permitió seguir opositando a las que habían acabado la carrera antes del año 45. La posibilidad se volvió abrir en 1961. En la promoción del 88, que es la mía, la mitad ya éramos mujeres. En la última promoción, más del 70 % son mujeres. Es una profesión a la que se accede solo por méritos y la igualdad está asegurada.
P ¿Por qué hay tantas mujeres registradoras?
R Igual que hay muchas mujeres magistradas o fiscales, yo creo que son profesiones en las que no tienes ningún tipo de discriminación a la hora del acceso. Todos comparecemos en igualdad de condiciones con nuestro esfuerzo y nuestro talento. Las mujeres somos más tenaces en el ámbito de las oposiciones. Eso da un plus respecto al hombre.
P ¿Cuánto tiempo cuesta sacar una oposición al Registro?
R Está costando una media de unos seis años.
P ¿Cuántos registradores hay en España?
R En estos momentos hay 1.058 registros de la propiedad y 60 mercantiles. El 46 % están ocupados por mujeres.
P ¿Ya se ha frenado la sangría de empresas catalanas que salen de Cataluña?
R Por desgracia no ha terminado, pero se ha ralentizado. En Cataluña falta seguridad jurídica y eso es esencial para que las empresas hagan sus planificaciones y vean sus perspectivas de futuro. Ya no vemos esa salida en estampida que se produjo en octubre, pero sigue existiendo un goteo incesante.
P ¿Cuántas empresas se han ido?
R Solicitaron irse 3.000 pero luego lo formalizaron unas 2.700, según los últimos datos que tenemos que son de finales de diciembre. Principalmente se han ido a Madrid, la Comunitat Valenciana, Baleares y Aragón. Las grandes beneficiadas han sido Madrid y València. Es una pena que sea por esta causa, pero la Comunitat Valenciana ofrece seguridad jurídica y muchas ventajas para cualquier empresa.
P ¿Qué gana la Comunitat Valenciana con esta llegada de empresas?
R Pues en principio lo que iba a ser un simple cambio de sede estamos comprobando que lleva detrás un traslado de producción. Va a traer puestos de trabajo y creará movimiento en el sector inmobiliario. El que venga gente a vivir en la Comunitat Valenciana es riqueza que se crea.
P ¿Hay empresas que están trasladando aquí la producción?
R Algunas sí. No tanto las fábricas, porque las plantas son difíciles de mover, pero las empresas de servicios sí. Por ejemplo, CaixaBank o el Banco Sabadell van poco a poco trasladando parte de sus servicios.
P ¿Cree que esta situación es reversible?
R No soy adivina y nunca se han dado estas circunstancias en España. Lo único con lo que se podría comparar es con la situación que se produjo en Quebec en Canadá. En ese caso, las empresas no volvieron mayoritariamente, pero es pronto para decirlo. Cuanto más tiempo se esté en situación de inestabilidad más difícil será que retornen. Esperemos que vuelvan a Cataluña y se normalice la situación. No deseo ningún mal a nadie.
P ¿Han comenzado a bajar los desahucios?
R Sí que han bajado. La realidad es que la mayoría de los hipotecarios están paralizados por las moratorias que se han dado. De todas maneras, un buen número de desahucios son por impagos en alquileres y por ejecuciones derivadas de pólizas de crédito o de deudas con la Agencia Tributarias o con la Tesorería de la Seguridad Social. El problema que ha pasado en España es el paro. Ningún deudor quiere dejar de pagar. Nadie quiere perder su hogar. Ha habido más desahucios en España porque, a diferencia del resto del mundo, el acceso a la propiedad es fácil y universal. Aquí se daban créditos hipotecarios de forma generalizada.
P ¿Cómo está la Comunitat Valenciana?
R En la Comunitat Valenciana ha habido muchos desahucios de segunda vivienda. No es lo mismo quedarse sin hogar que perder el apartamento.
P ¿Han notado la recuperación del sector inmobiliario?
R Las compras de vivienda han subido un 15 % en el último año. Pasa una cosa curiosa. Ha aumentado el número de compras pero no el de hipotecas. Antes había más hipotecas que ventas y ahora hay más ventas que hipotecas. Eso quiero decir que la gente está pagando más al contado con los ahorros. Además, una de cada tres hipotecas se constituye con interés fijo.
P ¿Están viendo un incremento del precio de la vivienda?
R Sí, hay una tendencia al alza sobre todo en las grandes ciudades. A nivel nacional la subida es del 7,2 % en 2017. En València los precios todavía son muy competitivos. En Madrid el precio de la vivienda es excesivo.
