El aeropuerto de València quiere darle un empujón al tráfico de mercancías. Así lo explicó ayer el nuevo director del aeropuerto de València, Joaquín Rodríguez, que desde que llegó a su nuevo puesto, hace poco más de cien días, ha mantenido encuentros con el sector transitario de València con vistas a captar negocio. Concretamente, con el Propeller Club, la asociación de empresarios logísticos, y con la asociación de transitarios Ateia.
En estos momentos, el movimientos de carga en València está muy por debajo de las expectativas. Pese al crecimiento del 4,3% del pasado 2017, y el 4,5% del primer trimeste, apenas se mueven 13.125 toneladas al año, un 18,2% de su capacidad total.
Hace un tiempo Aena ya eliminó la tasa para el transporte del mercancías. Ahora, el enclave valenciano está tratando de seducir a las empresas con rebajas en el precio de arrendamiento en el edificio administrativo, que está al 30% de ocupación. El aeropuerto ha rebajado ostensiblemente los gastos generales y de urbanización.
El hándicap sigue siendo la falta de operadores multicliente, ya que los cargueros que operan solo manejan su mercancía. Rodríguez pone en valor la conectividad con los principales hub europeos gracias a las grandes aerolíneas, que pueden exprimir sus bodegas para el envío de mercancía.
Entre los objetivos del nuevo director, ingeniero aeronáutico que procede de la dirección del aeropuerto de Melilla, destaca la vocación de mejorar los servicios para las aerolíneas y los pasajeros. Hace unos días se estrenó una nueva sala VIP, con el doble de capacidad. Y se van a sacar a licitación tres nuevos locales comerciales de venta multiproducto, que se suman a las estrenadas hace poco.
Entre las mejoras, el aeropuerto busca adaptarse también al cada vez mayor tráfico intercontinental, con una nueva zona de mil metros para recibir a los vuelos de zona no schengen para agilizar el control documental. En general, se prevén 23 millones de inversión hasta 2021.
Por lo demás, el nuevo director celebró el incremento de pasajeros, con un 28% de crecimiento en el primer trimestre. València es el cuarto de Europa que más crece. Para este verano (de finales de marzo a octubre) habrá 6,2 millones de asientos disponibles, con 81 destinos desde València.
No todo lo que luce en Manises es turismo: el 26% de pasajeros son de negocios, según los datos que maneja Aena, frente al 35% de pasajero vacaciones y el 32% de visitantes a amigos y familiares. Y algunas cosas no cambian: para el nuevo director, recuperar la ruta a Nueva York es objetivo «prioritario».
