P ¿Cómo va a cambiar la tecnología nuestras vidas?
R Realmente ya forma parte de nuestro día a día por la ubicuidad del móvil. Desde que nos despertamos hasta que nos acostamos el móvil está a nuestro lado. Ya hay generaciones para la que es inconcebible la vida sin el móvil. El poder de transformación de la tecnología en todos los ámbitos de la sociedad es tremendo. Desde la medicina a la educación, el transporte, la logística o los sistemas productivos. Para mí lo más importante es que aprovechemos esa tecnología para lograr un impacto positivo en la calidad de vida de las personas. Lo segundo más importante es asegurarnos de que estamos educando al ciudadano medio en temas tecnológicos. Ahora hay una brecha muy grande entre la tecnología y el conocimiento de un ciudadano medio, que la ve como magia.
P La semana pasada el ministro de Agenda Digital, Álvaro Nadal, dijo en València que una de las prioridades del Gobierno era la introducción de la inteligencia artificial en la medicina. ¿Cómo va a cambiar la sanidad?
R La inteligencia artificial tiene un gran potencial en la sanidad. Una de las áreas más importantes es el uso de la inteligencia artificial para el análisis de datos médicos. Hoy en día lo que hacemos es digitalizar la biología. Es decir, al final todas las pruebas médicas que se hacen a una persona están en un ordenador. El secuenciamiento del ADN son ceros y unos en el ordenador. Si queremos conseguir lo que se conoce como una medicina de precisión (que es personalizada, preventiva y predictiva) solo lo vamos a poder hacer apoyándonos en técnicas de inteligencia artificial.
P ¿En qué áreas es mejor la inteligencia artificial?
Una de las áreas en las que la inteligencia artificial funciona mejor que los humanos es en la búsqueda de patrones cuando hay una cantidad ingente de datos no estructurados. Hay otra área muy importante que es el de la robótica de precisión para hacer operaciones a distancia.
P Antes hablaba de la importancia del móvil, pero usted ha pronosticado su desaparición.
R Sí, es cierto. Si hay tanto progreso tecnológico y es tan rápido, no tiene sentido pensar que un dispositivo que apenas tiene diez años se va a perpetuar en el tiempo. El móvil va a evolucionar. Ya hay un montón de tendencias que lo están transformando, dispositivos que lo complementan como los smartwatchs o la ropa inteligente. Quizás nos liberaremos de la esclavitud de la pequeña pantalla con gafas de realidad aumentada o incluso con implantes en la retina donde se proyecte la información.
P ¿Cómo nos controlan las empresas a través de los datos?
R Bueno, en Europa esta situación se va a regular con la introducción de la regulación GDPR este mes. Hasta ahora, los servicios que usamos en el móvil como Facebook o Google quieren proporcionarnos una experiencia personalizada y para ello tienen que entendernos y necesitan analizar nuestros datos. Hasta ahí no hay problema siempre que haya transparencia en cuanto a qué tipo de datos se están captando y para qué se están utilizando. Yo creo que cada vez hay más concienciación de que si usas algo gratis obviamente no es gratis. La manera que tienen para ganar dinero es con tus datos.
P ¿Cómo se puede proteger la gente que no entiende de tecnología?
R Yo creo que lo fundamental es la educación. Esta educación tiene que empezar desde los niños. Hay que enseñarles a entender los datos y a programar. Eso no se aprende apretando los botones de un iPhone. Sería una pena no aprovechar el potencial de la tecnología por hacer un mal uso de ella.
P ¿Cuál va a ser la siguiente tecnología que va a transformar nuestras vidas?
R A nivel individual va a haber cada vez más simbiosis entre lo biológico y lo electrónico, y la inteligencia artificial formará parte de más servicios
P ¿Cómo va a ser esa simbiosis entre lo biológico y lo electrónico?
R Ya hay muchos ejemplos de diferentes tipos de chips implantados subcutáneamente y de prótesis electrónicas controladas por el cerebro. El dispositivo más antiguo y conocido es el marcapasos. Ahora hay implantes cocleares o sistemas de estimulación profunda del cerebro. Cada vez más se van a subsanar capacidades que estamos perdiendo o que nunca hemos tenido con tecnología. Una pregunta ética que surge es: ¿Por qué nos vamos a detener en capacidades que no tenemos?, a lo mejor yo quiero tener una supermemoria.
P España es el tercer país del mundo en desarrollo de redes de alta velocidad. ¿Estamos preparados para aprovecharlo?
R Necesitamos invertir más en innovación e investigación. Es muy importante que a nivel educativo nos planteemos en serio si el plan desde primero de primaria es acorde al mundo tecnológico en el que vivimos. Yo llevo años proponiendo que se incorpore una asignatura de pensamiento computacional.
