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Primer trimestre

La inestabilidad en los grandes mercados de la UE frena el comercio exterior valenciano

El superávit comercial retrocede un 7,3 % en el primer trimestre por el frenazo de las exportaciones América y África crecen

Imagen aérea del puerto de València Levante-EMV

La C. Valenciana sigue manteniendo el tipo en comercio exterior, aunque sus mercados tradicionales, la grandes potencias europeas, comienzan a emitir algunas señales preocupantes fruto de la inestabilidad política.

Tras el hundimiento de las exportaciones del segundo semestre de 2017, en los tres primeros meses de este año la autonomía se mantiene en términos positivos: un 0,8 % de incremento de las ventas entre enero y marzo. De hecho, la autonomía ha reducido la distancia con el conjunto del país, que hoy solo crece un punto más (1,8 %).

Las cifras se han visto condicionadas por un mes de marzo realmente malo, con una caída del 2,6 % debido al efecto calendario. Mientras el pasado año la Semana Santa cayó en abril, este 2018 se ha celebrado en marzo, haciendo que los datos sufran en la comparación.

Así las cosas, la C. Valenciana ha recuperado en el primer trimestre la tercera posición entre las más exportadoras, con 8.053 millones y solo por detrás de Cataluña (18.236) y Andalucía (8.316). Pero las importaciones crecen más que las ventas, con lo que el superávit comercial ha caído un 7,3%. Sigue siendo una de las mejores balanzas comerciales, tras el País Vasco y Extremadura.

La radiografía de estos primeros meses de 2018 muestra algunas debilidades. Se han resentido las ventas de la C. Valenciana a algunos de sus principales mercados, como Alemania (-4,5 %), Italia (-0,9 %) y el Reino Unido, donde se han hundido un 19,3 %. Toda la UE, en realidad, retrocede un 1,3 % para el sector exterior valenciano, debido a las turbulencias que afectan a varios países. Alemania tardó medio año en formar Gobierno; Italia vive hoy una convulsión política que puede notarse en sus importaciones los próximos meses y las ventas a Reino Unido siguen en caída libre desde el Brexit. Solo Francia, históricamente el gran cliente valenciano, crece un 10,9 %, tras lograr en 2017 su mayor subida del PIB en 6 años.

Frente a esto, entre el resto de mercados destaca especialmente el crecimiento de América (+9 %), con especial incidencia en EE UU (7,2 %) pese al discurso proteccionista de Trump También todo el sudeste asiático y África, que ha comprado un 14 % más en estos meses. Solo retrocede Argelia, que cae un 13 % por la imposición de aranceles. Y China, un mercado que cae un 18 % estos tres meses.

En cuanto a los sectores, durante marzo creció de manera destacada la exportación de cítricos, un 12,5 % más. Es el resultado de una campaña que mejora los precios de la anterior al caer la producción.

Bien la naranja, mal el automóvil

En el lado negativo, en marzo descendió también la venta de productos cerámicos, un 6,1 %, uno de los motores de la exportación valenciana. Y como viene ocurriendo desde hace meses, vuelve a retroceder la venta de automóviles (-17,8 %), un sector que mueve uno de cada cuatro euros exportados. Tanto pesa Ford en las cifras de la provincia de Valencia que la hace caer seis puntos en marzo.

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