La estabilidad del gobierno popular como garantía para seguir creciendo y generando empleo y la bajada de impuestos. Esta fue la «política social» que ofreció ayer el candidato Fabra, quien mantuvo que sólo el Partido Popular puede garantizar que aplicará el programa electoral frente a una izquierda, remarcó, que tendrá que pactar entre sí el suyo. Al argumento de la inestabilidad que supondría para la Comunitat Valencian un gobierno de izquierdas se agarró Fabra, quien trató de sacar pecho por sus políticas de apoyo a los emprendedores. El presidente de la Generalitat sostuvo también que había cambiado el modelo productivo al dar más peso al sector industrial.

En el apartado de regeneración democrática, Fabra habló de su decálogo para la regeneración democrática y sus propuestas para reducir el número de diputados en las Corts, eliminar el aforamiento de los altos cargos o la modificación de la firmas necesarias para la iniciativa legislativa. Se quejó de la callada por respuesta que la oposición había dado a estas medidas: «Ustedes sólo buscan poner en entredicho al PP, ustedes sólo van a la contra», se lamentó.