El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, aprovechó ayer su intervención en la presentación del libro «Conversación con Jordi Sevilla» para pronunciarse en contra de lo que denominó «juicios sumarísimos» que algunos políticos hacen a su partido por la gestión pasada. No aludió expresamente a Ciudadanos ni a Podemos, pero el reproche iba por ellos. «Es difícil que al asumir toda la historia del partido no se sienta un poco de vergüenza» respecto de algunos episodios, vino a decir, pero acto seguido agregó que si hay un partido que puede sentir «orgullo» por su trayectoria global ese es el socialista.

Puig bromeó al señalar, en referencia a Jordi Sevilla, que la persona «que manejará la economía en el deseable gobierno de Pedro Sánchez no es candidato en estas elecciones». No se refirió a los malos augurios demoscópicos para el PSOE, pero abordó el asunto al indicar que sistemáticamente se dice que la «socialdemocracia está en sus últimos telediarios», pero el vaticinio, dijo, no se cumple.

El jefe del Consell avaló las palabras de Sevilla en las que expresa que este Gobierno «ha expulsado a los valencianos del circuito de la igualdad y la solidaridad», en referencia a la discriminación en la financiación e inversiones del Estado. f. arabí valencia