La semana en que la división interna de Ciudadanos pasó de latente a manifiesta por una votación sobre el derecho de las parejas de hecho a adoptar hijos, el acto de Rivera dejó algunos gestos. Como que fue el concejal y portavoz del partido Fernando Giner el que hizo de cicerone de la comitiva de los líderes nacionales. No así el síndic en las Corts, Alexis Marí, que llegó por su cuenta con la eurodiputada Carolina Punset algo después y la seguridad del acto no les dejó entrar por la ´puerta de autoridades´. Habían barajado no acudir, al sentirse ninguneados por Madrid. Pero acudieron, recibidos entre aplausos de militantes.

Desde el partido señalaron que Mari y Punset entraron por donde correspondia, para ser captados por las cámaras y saludados por los militantes. Y que el error fue la entrada del primer grupo, de Giner y Arrimadas, por el paso más cercano al escenario y que pasó más inadvertido.

No estuvo el diputado alicantino Emigdio Tormo. Es piloto de avión y tenía trabajo. Pero envió un vídeo por twitter, a 35.000 pies. Tampoco faltaron banderas venezolanas, en la semana en que Rivera ha ganado al PP esta batalla simbólica para los conservadores.