La centralidad política a la que durante meses ha apelado el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, menguó anoche de forma muy considerable ante el avance del PP. Pese a la debacle en el conjunto de España, donde Ciudadanos es el partido entre los cuatro grandes que más apoyos pierde, la formación centrista resiste en la Comunitat Valenciana, donde logra su tercer mejor resultado, al conservar los cinco diputados de las elecciones del 20 de diciembre, un éxito mayúsculo si se compara con el resultado nacional.
Ahora bien, pierden 37.795 votos al pasar de los 424.621 obtenidos hace seis meses a los 386.826 del escrutinio de anoche. En porcentaje de votos, la caída es de casi un punto porcentual y el resultado se queda en el 14,9 %.
El escrutinio refuerza a la actual dirección de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana pese a los problemas surgidos en las últimas semanas, especialmente en Alicante. El partido pierde en esta provincia 1,2% puntos porcentuales al pasar del 17 % al 15,8 %. El peor resultado se produce en Castelló, con una bajada del 1,37 %. Donde mejor resiste es en Valencia, con 0,6% de caída. La cara negativa es que el resultado se convierte en un aviso a navegantes porque la fuga de votos es relevante y evidencia una tendencia de regreso de apoyos al PP.
Precisamente, el presidente popular, Mariano Rajoy, en su cierre de campaña el viernes en Valencia pidió expresamente el voto para su partido procedente de Ciudadanos, una llamada al voto útil que ha funcionado, aunque con efectos menos catastróficos que en el conjunto de España.
Anoche, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ya enseñó sus cartas al lanzar un mensaje expreso a Ciudadanos para unirse en las Corts Valencianes y hacer frente al tripartito. Además, la extrapolación de los resultados de anoche a unas hipotéticas elecciones autonómicas daría la mayoría absoluta a la suma de votos del PP y Ciudadanos. Ambos partidos, aunque cercanos ideológicamente, no han tenido puntos de encuentro en el Parlamento valenciano. De hecho, Ciudadanos ha votado en más ocasiones con los grupos que apoyan al pacto del Botànic, PSPV, Compromís y Podemos, que con el PP, una forma de intentar marcar su propio espacio político. Aún así, el batacazo a nivel nacional maquilla la pérdida de apoyos en la Comunitat Valenciana. Ayer, en la flamante sede de Ciudadanos en la calle San Vicente de Valencia se dio cita la cúpula del partido, que mostró una sensación agridulce por los resultados que llevan a su líder, Albert Rivera, a una situación complicada. Los dirigentes de Ciudadanos estuvieron arropados en la sede del partido por un centenar de afiliados junto a los candidatos al Congreso y al Senado, concejales del Ayuntamiento de Valencia y diputados autonómicos.
El nuevo candidato por Valencia, Toni Cantó, que sustituyó a última hora al anterior, Vicente Ten, aseguró que mantener los cinco diputados en la Comunitat Valenciana supone «una victoria» para Ciudadanos, aunque obvió el retroceso en votos.
Giner: «Nos hemos consolidado»
En esta línea, el portavoz autonómico, Fernando Giner, aseguró que después de tres elecciones se demuestra que «el centro está consolidado y llega para quedarse». Giner reivindicó la utilidad del proyecto de Ciudadanos «ya que es un espacio de centro que no existía hace un año» y defendió que el proyecto tiene futuro.
