El Grupo Aguas de Valencia prevé duplicar hasta finales de 2015 el número de contadores inteligentes instalados, que evitan molestias a los ciudadanos para realizar la lectura del contador al hacerlo mediante sistemas de radiofrecuencia.
Así lo ha explicado a EFE el director del proyecto de telelectura del grupo y de la unidad de medición avanzada de contadores, Víctor González, antes de presentar esta iniciativa en la que Aguas de Valencia es pionera en España en la feria Efiaqua.
Gracias a un módulo de radio que se instala sobre el contador, se puede enviar la información sobre consumo al exterior sin necesidad de enviar a un operario a realizar la lectura, lo que supone "un paso más avanzado" a la telelectura en recorrido (un operario con una antena capta los datos sin revisar el contador), ha señalado.
Los módulos de radio envían los datos a los equipos concentradores y éstos a su vez a un concentrador central, que los envía al servidor central mediante comunicaciones de telefonía.
Este avance permite leer el contador con una frecuencia mucho más alta y una gestión integral del agua para evitar la pérdida de agua por fugas en las tuberías del grupo, que supone un 20 % de desviación.
Para el ciudadano, la telelectura del contador representa evitar molestias ya que no se accede al domicilio, y conflictos cuando se efectúan las estimaciones de consumo.
También permite avisar a los clientes en casos de fugas en el interior de las viviendas, que en algunos ocasiones pueden traducirse en recibos de "cientos o miles de euros", y ofrecer información a los clientes sobre su consumo, a través de la página web de Aguas de Valencia.
Según González, además permite actuar cuando realmente existe una fuga y así no tener que buscar la anomalía.
A día de hoy, Aguas de Valencia dispone de 375.000 contadores inteligentes instalados en la ciudad de Valencia, todo el municipio de Gandia, Quart de Poblet y algunas poblaciones pequeñas de la provincia.
Aguas de Valencia proyecta en dos años completar el parque de contadores inteligentes de Calpe y Sagunto, así como en Tortosa (Tarragona).
En otro municipio catalán, Sant Carles de la Rápita, también ha instalado ya algunos contadores de este tipo.
Los planes del grupo son completar la "teleleída" en la ciudad de Valencia y alcanzar los 600.000 contadores inteligentes a finales de 2015 con los proyectos que mantiene abiertos.
Aguas de Valencia trabaja con todos los fabricantes de contadores para poder adecuar la solución tecnológica a cada necesidad y adaptarse al parque de contadores.
Para González, este sistema es "una solución pionera en España u a nivel europeo" y con él el grupo se ha situado a la cabeza en instalaciones de telelectura en el ámbito nacional.
La telelectura permite fomentar el consumo racional y sostenible del agua, prevenir consumos irracionales y detectar roturas y fugas, además de ahorro de costes al detectar de forma rápida las fugas.
