La reducción de unidades en la Educación Secundaria de la red pública de esta comunidad, para el curso próximo 2011-12, como consecuencia de la unión de grupos que sumados no lleguen a la ratio de 30 alumnos, independientemente de la línea lingüística (en valenciano o en castellano), fue confirmada ayer a los representantes de la ejecutiva de la Associació de Directors d'Institut por el director general de Ordenación y Centros Docentes de la Conselleria de Educación, Rafael Carbonell.

En cualquier caso, Carbonell les aseguró que se tenderá a que prime la línea en valenciano, pero al mismo tiempo se contemplará una serie de desdobles de asignaturas, con un número de horas, para permitir que algunas de las materias se puedan dar en castellano. Asimismo, la enseñanza del inglés se impartirá en este idioma extranjero; Lengua y literatura castellana será en castellano y Llengua i literatura valenciana, en su correspondiente.

Los grupos se juntarán cuando en cada unos de ellos se pueda dar el caso de que haya menos de quince alumnos. En total, su suma no deberá superar los 30 estudiantes por aula.

Sin embargo, y a pesar de todos los rumores que en las últimas semanas ha habido, el responsable educativo garantizó que no habrá aumento de ratio (alumnos por aula/profesor), salvo casos muy excepcionales, como tampoco de horas al profesorado "porque está el acuerdo de plantillas", señaló a Levante-EMV el portavoz de los directores, Vicent Baggetto, al concluir la reunión en la conselleria.

Esta reunión ha sido repaso de los avatares del curso curso y de preparación para el nuevo, tras el anuncio de la conselleria de implantar a partir del 2011-13 y de forma progresiva el nuevo modelo plurilingüe. Con él, desaparecen las líneas en valenciano y se mete en el mismo aula a alumnos que desean estudiar en este idioma oficial con los que lo quieren hacer en castellano, independientemente de la zona lingüística donde se viva. No obstante, la unión de grupos es un anticipo a este proyecto.

Los criterios de organización del nuevo curso, que la inspección de Educación ha ido informando en los centros, vienen marcados en el programa informático Itaca, que no permite constituir unidades a partir de un número de alumnos. Así, en esta primera fase de introducción del Itaca, en Bachillerato se mantienen los 35 alumnos por aula y en Secundaria, los 30. Pero, en una segunda fase, es "cuando vendrán los ajustes" apuntó Baggetto.

Lo que los directores denominan "confesiones" con la inspección educativa para determinar el número de profesores necesarios en función de la matrícula y grupos para el curso próximo, tendrán lugar la próxima semana.

A la vez, los institutos ya están recibiendo el importe para pagar los gastos de funcionamiento correspondientes al último cuatrimestre, que se había retrasado.

Por su parte, y tras la mesa sectorial de Educación de la semana pasada, la Federación de Enseñanza de CC OO-PV reclama que se hagan públicos los criterios de creación de unidades para los centros de enseñanza Secundaria. Este sindicato criticó que desde la inspección educativa se esté instando a los centros a configurar grupos con un ratio de 33 alumnos, cuando al inicio de curso era de 30.

En la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE-UGT) cuestionaron que la diferencia entre los profesores que han trabajado en el sistema educativo público en el curso 2010-2011 y los que lo hicieron en el curso pasado es de 2.750, lo cual representa una reducción del 5,5 %. En su opinión, son "continuista y sin utilidad práctica" las instrucciones sobre organización y funcionamiento para el próximo curso, puesto que "o son estrategias para atajar con éxito la alta tasa de fracaso escolar de la Comunitat".

Desde el STE-PV exigen una aclaración sobre las instrucciones que está dando la inspección en la Formación Profesional tendente a no abrir grupos con menos de 25 alumnos inscritos, cuando lo que está regulado es un mínimo de 12 estudiantes, indicaron.

Los padres alertan del precio a la baja entre empresas de comedor

La Confederación de asociaciones de madres y padres de alumnos Gonzalo Anaya aconseja a las AMPA que, a la hora de elegir el comedor, prime la calidad del servicio al precio del menú, la calidad al precio. Ante el estudio publicado por la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) en el que se constata el "desequilibrio" de los menús escolares, y ante la "guerra de precios" entre las empresas aspirantes a ocupar los comedores escolares, la confederación recuerda a las madres y padres de alumnos que voten por la opción que aporte la mayor calidad en el servicio del comedor. Desde la organización han detectado "una competencia de los precios a la baja entre las empresas candidatas a gestionar los comedores que podría redundar en una bajada de la calidad de los menús escolares". levante-emv valencia