En medio del conflicto educativo por la defensa de la escuela pública, los impagos y los recortes, la directora general de Educación de la conselleria, Beatriz Gascó, ha enviado una carta a las asociaciones de padres de alumnos (AMPA) en la que les recuerda que para suprimir actividades extraescolares o complementarias, como muchos profesores han acordado en sus claustros, se necesita una mayoría de dos tercios del consejo escolar del centro respectivo que es el que tiene la competencia para modificarlas, revisarlas o aprobarlas.

Estas actividades ya acordadas, que se incorporaron en su momento a la programación general anual del centro aprobada en el consejo, «deben llevarse a cabo» si no son suprimidas por los dos tercios citados, indica la circular de la conselleria. Sin embargo, Educación remite esta carta a las AMPA pero no a los equipos directivos de los centros.

Por su parte, la Asamblea de Directores de Secundaria, ante la supresión de las citadas actividades aprobada en muchas asambleas de profesores en las últimas semanas por el recorte salarial, ayer acordó unánimente recomendar «el mantenimiento de todas las que pueden suponer un beneficio formativo para el alumnado» y añaden que «nuestra actitud respecto a estas actividades es compartida por AMPA y alumnos, por lo pedimos al profesorado que utilice otras medidas reivindicativas».