El líder del PP, Mariano Rajoy, reclamó ayer que la reforma laboral sea "global" y "clara" y criticó la propuesta del Gobierno, por considerarla por parcial y confusa. "La reforma no debe hablar sólo de los despidos, sino ocuparse de todo: de la negociación colectiva y de la formación", dijo Rajoy en un acto en Barcelona para presentar a los candidatos del partido en las próximas elecciones catalanas, que se celebrarán en otoño. El líder popular advirtió de que, si el texto no se modifica en el trámite parlamentario, se convertirá en "un germen de conflictos y discusiones ante los tribunales", ya que tal como está ahora se presta a "interpretaciones diversas".
Rajoy criticó que la reforma planteada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, solo se ocupe de "no destruir empleo", cuando de lo que se trata es de "crearlo". También atacó al Gobierno por la lentitud en elaborar la propuesta, que llega "en el tiempo de descuento". "Llevan dos años y medio con este tema y solo emplean una hora y media para informar a la oposición", aseguró. "El objetivo prioritario es crear empleo y acabar con el paro. Poner un rumbo fijo y acabar con los bandazos continuos".
La imagen de España
El presidente del PP, proclamó ayer que España es "un gran país en el que se puede confiar", pero que necesita un Gobierno que fije un "rumbo cierto" y genere certidumbre ante el mundo frente a la "confusión total de los últimos años". En su discurso, señaló que existen "dudas" sobre la solvencia española para pagar su deuda pública y una sensación de "desconfianza e incertidumbre sobre el futuro".
En un momento en que, según Rajoy, "tenemos a todo el mundo pendiente de lo que hacemos", Rajoy recalcó que "España es un gran país", en el que los emprendedores y trabajadores han demostrado que cuando tienen un Gobierno de confianza "están a la altura de las circunstancias". "Como dije en Bruselas, en España se puede confiar y va a salir adelante una vez más", insistió el dirigente popular, que opinó que "mimbres hay", pero que falta un Gobierno que fije objetivos coincidentes con las necesidades que tiene el país.
Chaves pide comprensión a los sindicatos
Un "esfuerzo de comprensión" ante la reforma laboral y la situación actual de crisis pidió ayer a los sindicatos el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, convencido de que los cambios no van a "situar a los empresarios en posición de ventaja frente a los trabajadores".
El presidente del PSOE aseguró que entiende la reacción de los sindicatos y su convocatoria de huelga, aunque pidió a sus dirigentes que tengan en cuenta "la situación que estamos viviendo". Chaves está seguro de que la reforma laboral planteada por el Gobierno "va a conseguir" dar solución al "problema" del mercado de trabajo de España, que en su opinión "no es tanto el coste del despido, sino la estabilidad de la contratación".
Chaves aseguró que por "muy duras" que sean las medidas que ha adoptado el Gobierno lo está haciendo para "sacar a España de la crisis", pero, pese a lo que algunos piensan, también para "ganar las elecciones". Por eso, Chaves rechazó la idea de que se estén "quemando en la hoguera" por tomar decisiones impopulares como la bajada del sueldo de los funcionarios o la congelación de la pensiones. "Sacar a España de la crisis es lo más socialista que puede hacer el Gobierno", subrayó el presidente del PSOE. efe valladolid
