El Pleno del Senado dio ayer el visto bueno a la propuesta de Entesa Catalana y CiU para reformar la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional (LOTC) en la que, entre otros puntos, se insta al alto tribunal a declararse incompetente para dictar sentencia sobre el Estatut de Cataluña. El texto será ahora remitido al Congreso para su debate y tramitación.

La toma en consideración de la proposición de ley recibió el apoyo de toda la Cámara excepto el PP que votó en contra y el senador del PAR, José María Mur, que optó por la abstención. Los socialistas aseguraron que consideran necesario abordar el debate, aunque dejaron abierta la posibilidad de realizar modificaciones en el texto. Por su parte, el PP votó en contra y se negó a legislar "en caliente" cuando el Tribunal Constitucional está en pleno debate del Estatut.

La iniciativa propone que los magistrados del TC cesen automáticamente de sus cargos una vez que se cumplan seis meses del cumplimiento de su mandato. El objetivo es evitar que se repita la situación actual. Además, propone que el TC cuente con un plazo máximo de seis meses para dictar sentencia sobre los recursos contra las reformas de estatutos de autonomía y que, en caso contrario, sean desestimados.

Por otra parte, el pleno del Tribunal Constitucional, que se ha celebrado ayer por tercer día consecutivo, no volverá a reunirse hasta el próximo lunes, día en el que previsiblemente entrará a discutir el último borrador de sentencia sobre los recursos interpuestos contra el Estatuto de Cataluña. El TC ha reafirmado su competencia para dictar sentencia sobre el Estatut y ha confirmado la exclusión de las deliberaciones del magistrado Pablo Pérez Tremps, recusado por el PP.