Jaione Intxaurraga, procesada por colaboración con ETA en el sumario de Batasuna. se trasladó el pasado mes de abril a Francia para asistir a una exposición canina. Un mes antes lo había hecho, con permiso de la Audiencia Nacional, para cruzar su perra en un criadero de Chemin de Randonnees. La Sala obligaba a Intxaurraga a comunicar su regreso, lo que así sucedió.

En la solicitud realizada por la representación de Intxaurraga -acusada de ser la responsables de tesorería de Batasuna en Navarra y para quien el fiscal pide ocho años de cárcel- además de la petición para salir de España, se adjuntaba la inscripción de sus perros para asistir al evento canino.

Una orden, desestimada

Por otra parte, el presunto miembro de ETA Fermín Vila Michelena compareció ayer ante el tribunal de Belfast que tramita las órdenes de extradición emitidas por las autoridades judiciales españolas por supuestos delitos de terrorismo.

Haces dos semanas, este juzgado de primera instancia desestimó la primera orden a petición de la fiscalía, que representa los intereses españoles en la provincia británica.

En sus argumentos, el juzgado adujo que la primera orden de extradición dictada por la Audiencia Nacional presentaba "defectos de forma" al no especificar el tipo de delito atribuido al presunto etarra.