El Gobierno y la Fiscalía no ven "novedad alguna" en el llamamiento que, según publica hoy el diario El País, ha hecho Batasuna a ETA para un cese unilateral e incondicional de la violencia y han reiterado que las únicas opciones son que la banda deje las armas o que su brazo político condene la violencia.

Así se han pronunciado, antes de intervenir en el encuentro "La Justicia, hoy", organizado por el Consejo General del Poder Judicial, tanto el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, como el ministro de Justicia, Francisco Caamaño.

"Lo tenemos absolutamente claro: Esta situación sólo tiene una salida, que ETA abandone definitivamente las armas o que Batasuna abandone definitivamente a ETA", ha dicho Conde-Pumpido, que ha añadido que "mientras no se produzca una de esas dos circunstancias, todo lo demás no tiene ninguna relevancia. Para nosotros no hay novedad alguna".

Por su parte, el titular de Justicia ha subrayado que el Gobierno mantiene su postura, "pública y conocida" de que "lo que tiene que hacer ETA es abandonar todo tipo de violencia absolutamente".

"Mientras tanto, seguiremos actuando con el Estado de Derecho en todos los frentes que la legalidad pone a disposición del Gobierno", ha agregado Caamaño.

Según el ministro, que ha dicho que las últimas peticiones dirigidas por Batasuna a ETA "son reclamaciones como otras muchas", lo que tiene que hacer la formación abertzale "es abandonar definitivamente los entornos de justificación de la violencia. Eso es lo que debe hacer por un lado eta y por otro también Batasuna".

Preguntado por las posibilidades de que esta formación pueda presentarse a las próximas elecciones municipales, Caamaño ha recordado que el PSOE y el PP han acordado una reforma de la Ley Electoral con el objetivo de "evitar que quienes justifican la violencia puedan estar en las instituciones democráticas del Estado".