El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado hoy que ofrecerá consensos al PP "una y otra vez", aunque se ha quejado de que el Gobierno practique una estrategia que consiste en "pintarlo todo negro para entrar luego a dar hachazos" al estado del bienestar.

"Siempre es la misma estrategia", ha lamentado Rubalcaba durante su intervención en el XII Congreso del PSOE de Castilla y León, ante el que ha defendido la necesidad de que el Gobierno asuma que es España la que necesita de los consensos en materia social, institucional y política.

El líder socialista ha remarcado que "dibujos en negro" sobre las universidades españolas o la productividad de los funcionarios, con "alusiones al cafelito", son el "preludio de los hachazos" que llegan a través de los presupuestos, en los que plantean "su particular ajuste de cuentas con un estado del bienestar que nunca les gustó".

Rubalcaba ha asegurado que el Gobierno no tiene un plan para superar la crisis, a pesar de que los dirigentes del PP afirmaban que "la crisis era Zapatero" y cuando gobernaran ellos la situación se resolvería, ya que el fin era "llegar a la Moncloa" para desplegar "sus ministros con martillo para dar a todo lo que tienen por delante".

Sin embargo, el máximo dirigente del PSOE ha recordado que no es partidario de "la liga del cuanto peor, mejor", por lo que ha reiterado que a pesar de las "líneas rojas" que ha planteado al Gobierno en materia de estabilidad presupuestaria y de la prestación de servicios públicos esenciales, mantiene su oferta de diálogo por el bien de España, porque "lo necesita".

Rubalcaba prevé que el Gobierno va a convertir su mayoría absoluta en una "falta de respeto absoluta" a unos ciudadanos "están angustiados" y que observan cómo la confianza de la que hablaba el PP antes de las elecciones la han "dilapidado en 100 días", un periodo que al líder socialista le ha parecido de "100 años".

Sobre la reforma laboral, ha acusado al Gobierno de poner "patas arriba el sistema de relaciones laborales" tejido en España durante las últimas décadas a base de diálogo social y, "con la crisis como excusa", plantear las condiciones de trabajo que "siempre quisieron" y que se basan en "la ideología más extrema de los empresarios más duros de España".

En materia de relaciones institucionales con las comunidades autónomas, Rubalcaba se ha quejado de que el Gobierno responsabilice a los ejecutivos autonómicos del déficit público y lance un mensaje que consiste en que les va a quitar ingresos porque "despilfarran".

El líder del PSOE ha alertado de que tras este discurso del Gobierno se esconde un "gran ajuste de los servicios que prestan las comunidades autónomas", a las que ha anunciado que va a defender de un "ataque desmedido", porque desarrollan un "buen modelo" de descentralización.

Para Rubalcaba, "no basta" con que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se reúna hoy en Madrid con los presidentes de las comunidades autónomas gobernadas por el PP, sino que debe rehacer el consenso institucional con todas las autonomías.

Ante esta situación, el secretario general del PSOE se ha mostrado abierto a pactar "ahorros, porque hay margen", en la prestación de los servicios de sanidad y educación, aunque se ha negado a que se produzcan "recortes", porque tras ellos hay "caras y ojos".

En este punto se ha referido a los 10.000 millones de euros de ajuste que el Gobierno va a pedir a las comunidades autónomas en educación y sanidad y, ante la posibilidad de que se instaure algún tipo de copago sanitario, ha asegurado que prefiere "mil veces" que la sanidad pública atienda a unas cuantas personas que crean que están enfermos sin estarlo realmente, a que "se deje a un solo enfermo por atender" porque no vaya al médico para no pagar el copago.

Más alemanes que los alemanes

La recién aprobada Ley de Estabilidad Presupuestaria hace a los españoles "más alemanes que los alemanes", sin margen para afrontar años que vengan "mal dadas", y "enloquecidamente atados de pies y manos", en palabras de Rubalcaba.

El líder del PSOE ha asegurado que con esta limitación presupuestaria el Gobierno pretende ser "más papista que el Papa", en referencia a las directrices marcadas por la canciller alemana, Angela Merkel, en materia de limitación del déficit público.

Rubalcaba ha ironizado sobre la Ley al señalar que no puede confundirse el "rigor" presupuestario con el "rigor mortis", ya que los socialistas defienden que el déficit cero impuesto por el Gobierno es contraproducente.

"Hay que ser rigurosos pero dejando márgenes de flexibilidad para hacer frente a los problemas que puedan venir", ha resumido Rubalcaba antes de acusar al Gobierno de volver al "origen de la discusión" que acabó en el pacto para reformar la Constitución el verano pasado.

En opinión de Rubalcaba, "lo que pone en la ley no es bueno para la economía española" y ha añadido que las políticas europeas que inspiran al Gobierno "están llevando a la recesión".