El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha considerado posible que una Cataluña independiente siga formando parte de la UE y está convencido de que eso "se desarrollará en el marco de la negociación política".

"Se puede entender que a la primera de cambio haya resistencias", ha asegurado este lunes en rueda de prensa desde la Generalitat, donde ha presentado el manifiesto del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir redactado por el expresidente del Parlamento catalán Joan Rigol.

Al preguntársele por la advertencia de Joaquín Almunia (CE) de que la independencia implica salir de la Unión, Homs también ha dicho que "no hay manuales de instrucciones" que expliquen cómo debe ser un proceso de independencia y detallen los pasos.

Por eso, considera fundamental que haya "democracias democráticamente expresadas que sean lo suficientemente sólidas", y de ahí la importancia de una consulta, además de asegurar que el criterio del Gobierno catalán es que lo que se acabe imponiendo sea una voluntad política y democrática.

"Si planteamos las cosas de este modo, saldremos adelante", y de ahí la importancia de grandes consensos y de involucrar a agentes sociales, como trata de hacer el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir.

"Gran contradicción"

Homs ha asegurado que el Gobierno central escenifica una "gran contradicción": intenta restar importancia a la magnitud del debate soberanista catalán por ser un asunto interno del Estado, pero muestra su inquietud si ámbitos internacionales apoyan las demandas catalanas.

"Dice que es un tema interno pero se pasan todo el día llamando a embajadores y transmitiendo su disgusto cuando alguien se posiciona", ha destacado el portavoz, en alusión a que el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha convocato a los embajadores letón y lituano tras las declaraciones de sus primeros ministros sobre Cataluña.