El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha dicho hoy que hay que tratar de "impedir que etarras que no se han arrepentido y no han pedido perdón a las víctimas se beneficien del principio de solidaridad que todos los españoles tienen mediante sus impuestos con el conjunto de la sociedad".

Fernández Díaz ha realizado estas manifestaciones tras reunirse con consejeros de comunidades autónomas del PP, al ser preguntado por la moción que insta a modificar la ley para que etarras excarcelados por la anulación de la aplicación retroactiva de la doctrina Parot no reciban ayudas estatales salvo que se arrepientan y pidan perdón o colaboren con la justicia.

"Si ellos son personas que después de haber cumplido con sus condenas no se arrepienten, no piden perdón, pues ese principio de solidaridad no tiene por qué aplicárseles", ha insistido.

Ha añadido que se trata de "prestaciones no contributivas sino asistenciales, como es el subsidio de excarcelación, o tener acceso a eventuales indemnizaciones", ha apostillado el ministro, que ha recordado que "ellos no han satisfecho las responsabilidades civiles que establecieron los tribunales por sus condenas".

Fernández Díaz ha dicho hoy que en España se utilizan métodos contra la inmigración ilegal como los que se aplican permanentemente en todo el mundo.

"Todos tienen el derecho y el deber de controlar sus fronteras y hacer que quien entra en sus países lo haga legalmente, y eso es lo que estamos haciendo con medidas de disuasión pasiva, que no son agresivas y que se están utilizando en todo el mundo", ha recalcado el ministro.

Jorge Fernández Díaz ha comentado que "como se podrá acreditar, las concertinas son un método con rollos de alambre de espino que se utiliza en España y en el extranjero permanentemente en todo tipo de establecimientos, que tienen por misión fundamental ser un elemento de disuasión pasivo para impedir que las personas salten esos muros o esas vallas".

Tras asegurar que tiene la misma sensibilidad por la defensa de los derechos humanos "como el que más", ha reflexionado: "Hay tragedias en el mundo en estos momentos y muchas personas que por desgracia viven en países en donde Europa en general y España en particular, a pesar de la crisis, son una maravilla para ellos".

En este sentido ha manifestado que él es el primero que está de acuerdo en que se haga todo lo posible "para ayudarles a tener una vida mejor". No obstante, ha aclarado que a él como ministro del Interior le corresponde controlar las fronteras de España.

"Todas las personas que quieran venir a España han de cumplir también las leyes, y la primera es entrar legalmente en nuestro país", ha explicado Fernández Díaz.

A su juicio lo que hay que hacer es "intentar todas las ayudas humanitarias y las medidas necesarias para cooperar con los países de origen y de tránsito para que no se vean abocados a esas situaciones".