La Policía ha suspendido por este jueves la búsqueda de los restos de Marta del Castillo en la escombrera de Camas (Sevilla), que retomó a primera hora de esta mañana y que, con la ayuda de una excavadora, ha mantenido durante toda la jornada.
La búsqueda en la escombrera, que se retomará mañana, es la cuarta que se realiza en el término de esta localidad sevillana, sin contar las también efectuadas en el río Guadalquivir, en el vertedero de Alcalá de Guadaira (Sevilla) y, el año pasado, en la finca Majaloba, en el término de La Rinconada (Sevilla).
Esta mañana, la policía ha desplegado una valla de plástico de color verde, de las empleadas en las obras, para rodear el perímetro de búsqueda y para limitar la visión de las cámaras de los periodistas, que tratan de tomar imágenes de los trabajos apostados a unos cien metros de distancia. Al lugar se han desplazado esta mañana tres vehículos de la Policía Nacional y una decena de agentes, pero a las seis de la tarde sólo permanecía ya un patrullero de la policía, mientras que a esa hora los vehículos de los periodistas sumaban ocho.
El padre de Marta, Antonio del Castillo, ha dicho que prefiere no hacer ninguna declaración mientras que no haya algún resultado, si bien la familia siempre ha pedido que se prosiga la búsqueda y que ésta no se cierre sin resultados.
La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, ha reiterado su solidaridad con la familia de Marta y ha expresado "el compromiso de seguir trabajando con la esperanza de que las investigaciones policiales arrojen luz sobre el paradero de los restos de Marta". Crespo ha señalado que la última prueba realizada, la del test de verdad al que se ha sometido el asesino confeso de Marta, Miguel Carcaño, no es determinante y que sólo es "un paso más en el camino de la investigación policial".
La delegada del Gobierno ha hecho un llamamiento para "dejar a la policía que siga trabajando", porque "hay que intentar que la lógica expectación" que suscita el caso "no interfiera en la labor de los expertos". Crespo ha dicho comprender el interés ciudadano en torno a la búsqueda "porque cualquier familia está identificada con el dolor de la familia de Marta", pero ha insistido en demandar "prudencia en torno al caso".
Tras la muerte de Marta del Castillo, en enero de 2009, ya se rastreó en este lugar, al que ahora se ha vuelto porque podría ser uno de los puntos señalados en el informe del "test de la verdad" realizado en Zaragoza a Miguel Carcaño.
El pasado 6 de marzo Carcaño, interno en la cárcel de Herrera de la Mancha, se sometió en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza al denominado "test de la verdad", con el que se pretende obtener información para localizar los restos de la joven.
La última búsqueda policial se produjo en octubre de 2013, en la finca Majaloba, en las proximidades de Sevilla, aunque sin resultados positivos Los restos de la joven también han sido buscados en el río Guadalquivir, en un vertedero, en la denominada Ruta del Agua, en Caño Ronco (Camas, Sevilla) y en la finca Majaloba, además de en otras zonas próximas a la capital sevillana donde los rastreos se abandonaron pronto por la inconsistencia de las pistas.
Las distintas búsquedas han generado al Estado un volumen de gastos que aún no ha sido cuantificado por el Ministerio del Interior, si bien el juez los calculó, a abril de 2010, en 616.319 euros. Esa cifra incluía los trabajos de rastreo junto al río Guadalquivir y la búsqueda en el río, en el vertedero de basuras de Alcalá de Guadaira y los hasta entonces efectuados en la zanja de Camas que, en total, superaron los tres meses, y sólo la búsqueda en el vertedero fue calculada en 201.411 euros.
