El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz considera, en el auto con el que ha cerrado la instrucción de los "papeles de Bárcenas", que el PP empleó una caja B para el pago de retribuciones, complementos de sueldos, campañas electorales y gastos del partido.

Ruz da por acreditado que al menos durante 19 años, desde 1990 a 2008, el partido se habría valido de "diversas fuentes de financiación ajenas al circuito económico legal", según el auto, en el que ha propuesto juzgar en el caso a seis personas, entre ellas los extesoreros del PP Luis Bárcenas y Álvaro Lapuerta y el exgerente del partido Cristóbal Páez.

De las diligencias practicadas, explica el juez, "ha quedado indiciariamente acreditado" que el PP operó "desde 1990 y hasta al menos el año 2008" con varios sistemas de cuentas "que registraron corrientes financieras de entradas y salidas de dinero (ingresos y pagos) al margen de la contabilidad oficial declarada por el Partido y presentada ante el Tribunal de Cuentas".

Estas cuentas, añade, funcionaban "a modo de contabilidades paralelas, cajas de dinero en efectivo o Cajas B", denominación que usa el juez de forma indiciaria "por no aparecer asentados los pagos que integrarían las mismas en los libros contables, ni declarados a la Hacienda Pública".

Durante dicho periodo de tiempo, Luis Bárcenas, que desempeñó el cargo de gerente del PP, presentó en nombre del partido ante el Tribunal de Cuentas la información y documentación relativa a la contabilidad del partido y sus operaciones económicas de los ejercicios 1990 a 2008, en cumplimiento de las obligaciones contables impuestas por la normativa reguladora de la financiación de los partidos políticos vigente.

Pero en ningún momento, apunta el juez, ofreció "detalle o información alguna de los sistemas de contabilidad paralela o de 'caja B', atendida la opacidad que regía su funcionamiento".

El juez instructor considera acreditado también que Bárcenas, prevaliéndose de sus cargos de gerente y tesorero del PP, que ocupó de 1990 a 2009, llevó esta contabilidad paralela o caja B junto al también imputado Álvaro de Lapuerta, que fue tesorero del partido de 1993 a 2008.

Esta contabilidad se habría nutrido, apunta Ruz, "de donativos o aportaciones ajenos a la contabilidad oficial".

Según el instructor, esta contabilidad habría sido destinada, según ha quedado "incidiariamente acreditado", a diversos fines, como el "pago de retribuciones, complementos de sueldo o compensaciones a personas vinculadas con el partido".

También, "al pago de gastos generados en campañas electorales" y "al pago de distintos servicios y gastos en beneficio del partido o relacionados con su actividad".

Asimismo, añade Ruz, "a integrar el saldo de las cuentas de donativos anónimos y nominativos" del PP que concreta en el auto, de 190 folios.

El PP insiste en que desconocía la 'caja B'

El PP ha reiterado que "la denominada 'caja B' nunca ha sido una contabilidad conocida" por el partido, según un comunicado de prensa tras el auto del juez.

El Partido Popular ha emitido un breve comunicado con cinco puntos, en el primero de los cuales "reitera que la denominada 'caja B', que el juez atribuye al PP, nunca ha sido una contabilidad conocida por este partido".

En segundo lugar, el partido "no comparte la teoría de la obligación de tributar por el impuesto de sociedades por unas supuestas donaciones que el PP desconocía".

"Las donaciones a los partidos políticos siempre han estado exentas de tributación del impuesto de sociedades", argumenta el partido en el tercer punto de este comunicado, en el que añade que "la aplicación de la normativa del impuesto de sociedades conlleva en cualquier caso el derecho a aplicar los gastos deducibles".

Para concluir, el Partido Popular añade: "Con el debido respeto a las decisiones judiciales, el PP se reserva las acciones legales que le correspondan, en el ejercicio de su derecho de defensa, en el momento procesal oportuno".