El jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recalcado que Barcelona es una "ciudad catalana capital española del Mediterráneo" y lo ha dicho ante el presidente catalán, Artur Mas, quien por su parte ha puesto la mirada al continente para aseverar que los "nuevos horizontes" de Cataluña serán "europeos".
En pleno debate soberanista a cinco meses de las elecciones catalanas del 27 de septiembre en clave de plebiscito por la independencia, Rajoy y Mas han coincidido en la sesión inaugural de la conferencia ministerial UE-Mediterráneo, que se celebra en la capital catalana con la participación de más de una treintena de ministros de Exteriores de la UE y de la ribera sur mediterránea.
Mas ha bajado las escaleras del Palacio de Pedralbes para estrechar la mano a Rajoy y ambos han posado brevemente para los informadores gráficos, antes de acceder al interior del edificio para saludar a todos los ministros intervinientes en la conferencia y participar en la sesión de inauguración.
En el saludo, en el que los presidentes del Gobierno y de la Generalitat se han situado uno junto al otro ante las cámaras, han tenido oportunidad de intercambiar algunos comentarios mientras esperaban la llegada de los ministros de Exteriores.
La imagen ha sido diferente a la polémica de octubre de 2013, cuando Mas acudió a un Foro Económico del Mediterráneo en Barcelona, recibió a Rajoy y saludó a los asistentes pero declinó intervenir, tras un cruce de declaraciones entre representantes del Gobierno central y del Ejecutivo catalán sobre el papel que debía tener el presidente de la Generalitat en este evento.
En este ocasión, Mas ha aceptado la invitación para intervenir en el acto y ha pronunciado un discurso de bienvenida a los ministros en castellano, catalán, francés e inglés.
Sin hacer una referencia explícita al proceso soberanista, el presidente catalán ha enfatizado el vínculo de Cataluña con Europa al asegurar que tienen "vocación de capitalidad mediterránea y europea".
También ha apelado a las "raíces profundas" de Cataluña para remarcar que los catalanes pueden "mirar lejos a nuevos horizontes", que siempre imaginan "europeos y mediterráneos".
En su discurso, ha recordado que es el 129 presidente de una Generalitat que se creó en el siglo XIV y ha subrayado que "siglos atrás en estas tierras se redactó el libro del Consulado del Mar, la compilación de derecho marítimo más importante de toda la Edad Media".
En su discurso posterior, Rajoy ha tirado también de un libro, "El Quijote", de Miguel de Cervantes, pero en este caso para remarcar la españolidad de Barcelona.
"Les deseo que igual que Cervantes, se lleven ustedes el mejor recuerdo de esta grande famosa, rica y bien fundada ciudad que, fiel a su vocación mediterránea, sigue siendo hoy como ayer honra de España y flor de las bellas ciudades del mundo, como dijo la mayor pluma de la literatura española de todos los tiempos", ha subrayado.
El jefe del Ejecutivo ha remarcado que "pocos lugares están a la altura de esta ciudad catalana capital española del Mediterráneo" y ha concluido: "Es una ciudad abierta y de acogida que ha hecho famoso el nombre de España en todo el globo".
