La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado hoy que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, sólo tiene competencias para disolver el Parlamento catalán y convocar elecciones y le ha reclamado respeto a la legalidad y neutralidad en la campaña.

Sáenz de Santamaría ha hecho estas consideraciones en la rueda de prensa que ha ofrecido en el Palacio de la Moncloa al ser preguntada por el decreto de convocatoria de elecciones que hoy tiene previsto firmar el presidente de la Generalitat.

La vicepresidenta del Ejecutivo ha afirmado que ese decreto tiene que ajustarse a la legalidad y, de lo contrario, será recurrido y ha recalcado que Mas sólo puede disolver el Parlamento y convocar elecciones autonómicas, "nada menos y, sobre todo, nada más".

Sáenz de Santamaría ha recordado al presidente de la Generalitat que, con independencia de que sea el número 4 de una lista electoral, será el presidente de un Gobierno en funciones y como tal debe respetar a todos los ciudadanos, también aquellos para quienes parece que no gobierna.

De ahí que haya reiterado su exigencia de neutralidad en la campaña ante unas elecciones en las que -ha subrayado- sólo se elige a los representantes de los catalanes en el Parlamento autonómico "y no otra cosa".

El Gobierno vigilará no sólo que el decreto de convocatoria se atenga a la ley, sino que también se cumpla en la celebración de la diada el 11 de septiembre a pocas horas del comienzo de la campaña electoral.

También ha garantizado que la inversión en Cataluña prevista en los Presupuestos Generales del Estado responderán al interés general y a las necesidades de los ciudadanos de esa comunidad, como toda la acción del Gobierno central en la actual legislatura.

A juicio de Sáenz de Santamaría, que Artur Mas no se comporte "como uno entiende que debería hacerlo un presidente de una institución como es la Generalitat de Cataluña, no quiere decir que los catalanes paguen el pato de sus decisiones".

Ha lamentado el mensaje basado en la "reclamación constante" de algunos dirigentes catalanes y ha añadido que ese discurso "no se lo van a hacer ni estos presupuestos generales ni el comportamiento del Estado".

La vicepresidenta ha añadido que la diferencia entre ambos gobiernos es que Mas ha llenado el calendario "de fechas históricas" y Mariano Rajoy lo ha hecho del trabajo "que los ciudadanos de Cataluña merecen en su presente y en su futuro".

En su opinión, el Gobierno ha dado a la Generalitat suficiente estabilidad para agotar la legislatura, pero a Mas "no le dura el programa más de dos años" entre convocatoria y convocatoria, algo que a su juicio se resume en una palabra: "fracaso".