Sergio Morate, detenido este jueves en Rumanía como principal sospechoso de la muerte de Laura del Hoyo y Marina Okarynksa, su exnovia hasta hace un mes, ya contaba con antecedentes policiales por agresión a otra ex novia.

Morate, de 30 años y natural de Cuenca, trabajaba en el establecimiento de antigüedades propiedad de su familia, la cual se había distanciado de él a raíz de la citada agresión.

Sergio Morate cuenta ya con antecedentes penales por agredir y retener a otra chica en contra de su voluntad. Una amiga de Sergio comenta que en el caso anterior retuvo a otra pareja con la intención de asustarla. "Luego se arrepentía, se le fue la cabeza".

En su perfil de Facebook aparecen varias fotografías. En una de ellas, aparece con chándal, mostrando su cuerpo musculado tras una sesión en el gimnasio. En otra aparece subido en una avioneta.

Morate vivía en una urbanización de reciente construcción en Cuenca, aunque su familia posee una residencia en la localidad conquense de Palomera, su pueblo de origen y en donde habría retenido a una ex pareja. Según sus vecinos, Morate era un joven normal al que se veía pasear con frecuencia con sus dos perros.

Las dos jóvenes de Cuenca desaparecieron el pasado jueves cuando las dos chicas tenían previsto acudir a casa del joven para recuperar sus efectos personales, según el relato del primo de Laura y portavoz de la familia, Luis Javier Chamón.

El vehículo de Laura, precisamente, fue encontrado muy cerca de la casa del joven con efectos personales en su interior, entre ellos la medicación que precisaba para tratarse una afección de tipo cardíaco, lo que hacía saltar todas las alarmas.

Vecinos de la localidad conquense de Chillarón, donde se ubica la finca propiedad de la familia de Morate, han asegurado que la familia del joven ha abandonado el pueblo desde el pasado lunes cuando comenzaron los registros policiales.

José María, trabajador de una empresa dedicada a la restauración, pintura y venta de antigüedades cercana al lugar que está siendo registrado, ha indicado que no es habitual ver a Sergio Morate por el pueblo.

Ha indicado además que la finca inspeccionada es propiedad de los abuelos de Sergio Morate y que incluso es la vivienda habitual, aunque desde este lunes ni ellos ni la familia han vuelto por el pueblo.