La Policía Nacional ha detenido a cuatro jóvenes por su presenta implicación en la difusión de una falsa alerta de atentado yihadista en Estepona. Así lo ha confirmado esta mañana el delegado del Gobierno en Andalucía, José Antonio Sanz, quien ha añadido que se trata de cuatro estudiantes de instituto. Sanz ha advertido de que "no existe impunidad" en este tipo de actos, ni siquiera para aquellos jóvenes que puedan pensar que este tipo de acciones no se persiguen ni se descubren. "Todo lo contrario. Se descubre, se sabe quién lo hace y no es impune", ha aseverado el delegado antes de las repercusiones penales, de seguridad ciudadana y económicas, ya que las sanciones por este tipo de infracción penal oscilan entre los 600 y los 30.000 euros.

"Es inaceptable que se usen las redes sociales desde esa óptica", ha dicho el delegado, quien ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de todos los ciudadanos, incluidos a los padres de los jóvenes que tienen acceso a las redes sociales.

El 'fake' en cuestión es un montaje con una imagen de la portada de un diario de tirada nacional con el encabezamiento 'El terrorismo yihadista vuelve a golpear Francia' y el titular sobre el próximo atentado en Estepona.

El mensaje empezó a difundirse este pasado lunes, tras los atentados en la capital gala, a través de grupos de WhatsApp de jóvenes del municipio costasoleño.

Ante esto, el delegado del Gobierno ha dejado claro que "no existe en estos momentos impunidad, se localiza y se investiga todo y, además, existen repercusiones graves para quienes cometen este tipo de infracciones".

En concreto, repercusiones desde el punto de vista penal --ya se ha traslado la correspondiente denuncia al juez--, pero también administrativo, con sanciones, según la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, que podrían oscilar entre los 600 y los 30.000 euros de una falta grave.

"Quizá los jóvenes pueden pensar que las cosas no se descubren y es todo lo contrario, se sabe quién lo hace y no es impune quien haga este tipo de actuaciones", ha advertido Sanz, añadiendo que "no se puede jugar ni a la imprudencia ni a la frivolidad en el uso de las redes sociales".

A su juicio, "hay que exigir responsabilidad en el uso de las redes sociales, es un momento delicado y está habiendo un exceso de informaciones falsas, de alertas que son erróneas y que inducen a querer generar una situación que no es tolerable".

Sanz ha condenado, en consecuencia, este uso de las redes sociales, que ha tachado de "inaceptable", y ha hecho un llamamiento a los padres para que "estén atentos con los niños a la hora de informarles del uso de las redes sociales, pero no de su abuso".