PP y PSOE han votado a favor de la propuesta de Cándido Conde-Pumpido, Ricardo Enríquez, Alfredo Montoya y María Luisa Balaguer como magistrados del Tribunal Constitucional por el cupo que le corresponde renovar al Senado y que deberá aprobar definitivamente el Pleno de la Cámara Alta la semana que viene, por mayoría de tres quintos.

La Comisión de Nombramientos ha elegido estos cuatro nombres con los únicos votos a favor de los dos grandes partidos, ya que Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea no ha votado, ERC tampoco ha participado en la votación, el PNV no ha asistido a la comisión y el Grupo Mixto se ha abstenido.

La comisión ha escuchado entre el martes y el miércoles a los 15 aspirantes que le habían presentado los parlamentos autonómicos para los cuatro puestos, aunque han sido elegidos los dos nombres promovidos por el PP, Enríquez y Montoya, y los otros dos del PSOE, Conde-Pumpido y Balaguer. El reparto finalmente es al 50% entre ambos partidos, pese a que el PP tiene más del doble de senadores (149) que los socialistas (62).

Los portavoces de ambos grupos en el Senado, José Manuel Barreiro (PP) y Vicente Álvarez Areces (PSOE), han negado en todo momento que se haya producido un pacto previo y ajeno a esta comisión, alcanzado por las máximas direcciones de ambos partidos, y han defendido el procedimiento.

El portavoz de Unidos Podemos, Ramón Espinar, ha aludido en su intervención con Conde-Pumpido a las críticas que le dirigió el PP cuando fue Fiscal General del Estado con el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, aunque hoy apoya su ascenso al TC. "Votemos lo que votemos, nunca va a tener de mi grupo la consideración de inquisidor general del Estado, téngalo claro", le ha dicho Espinar.

Una votación "amañada"

La portavoz de ERC, Mirella Cortés, ha explicado que su partido no ha votado por considerar este Tribunal como político y no jurídico y la votación de este miércoles, "amañada". Y ha aprovechado para pedir que se permita el referéndum de independencia en Cataluña.

"No es admisible que se hable de amaño cuando es un proceso regulado que su propio partido ha asumido en otras ocasiones con candidatos de su propio partido. Se anula un procedimiento cuando le interesa a un partido. Repasen las actas de otros procesos anteriores", ha defendido airado el portavoz del PSOE, Vicente Álvarez Areces, que ha recordado que al exigirse una mayoría reforzada de tres quintos para aprobar la elección de magistrados es necesario el acuerdo.

Podemos ve "comisarios políticos"

Espinar le ha dicho al portavoz socialista que no es un mal procedimiento el que sigue el Senado, con candidatos autonómicos, sino el acto extraparlamentario. "El problema es que todo el mundo sabe que hay una parte de quienes hoy tomamos la palabra que decimos la verdad y otra que no", ha asegurado. "Llevan años colocando en los tribunales y magistraturas del estado comisarios políticos y repartiéndose comisariados políticos con el PP. Esto es lo que piensa mucha gente", ha asegurado.

José Manuel Barriero, portavoz del PP y último en tomar la palabra, ha rechazado las críticas. Le ha dicho a Mirella Cortés que "la mayoría del pueblo español no está de acuerdo" con la posición de ERC, que a su juicio sólo acepta la aplicación de las leyes cuando le dan la razón.

A Espinar le ha acusado de actuar con hipocresía porque sólo acepta el resultado de esta comisión "si coincide" con el criterio de su grupo y ha defendido que el proceso de elección de los magistrados es "una aplicación clara y directa de la democracia representativa". "Yo creo en ella y trato de aplicarla. Digan abiertamente que ustedes, no", ha añadido Barreiro.