Efe, Madrid

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha comunicado a los portavoces de los grupos parlamentarios que la reunión que inicialmente se había anunciado para septiembre sobre la marcha del proceso de diálogo con ETA se aplazará hasta que haya alguna novedad reseñable. Fuentes parlamentarias y del Ejecutivo informaron de que Rubalcaba habló el lunes telefónicamente con los portavoces para informarles de que no hay novedades en relación con el diálogo con la banda y reiterar su compromiso de mantenerlos informados.

No obstante, desde el Ejecutivo se asegura que el titular de Interior mantiene una relación continua con los grupos parlamentarios, más allá de reuniones formales, cuando visita el Parlamento. A principios de septiembre, Rubalcaba dijo que a lo largo de ese mes se reuniría con los portavoces parlamentarios para informarlos de la marcha del proceso, aunque ya entonces advirtió de que esa reunión se produciría cuando hubiera algo que contar.

Sin embargo, el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, negó ayer que Pérez Rubalcaba le haya comunicado que aplaza la reunión. Zaplana reconoció que en las últimas horas había mantenido una breve comunicación telefónica con Rubalcaba «pero no sobre ese tema». «A mí no me ha comunicado nada, no sé si se lo habrá comunicado al resto de los grupos», insistió el portavoz del PP. Zaplana reveló que habitualmente mantiene contactos telefónicos con el ministro del Interior pero reiteró que «esa noticia, en esos términos, yo no la he tenido».

Homenaje a etarras

Por otra parte, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pidió ayer al juez Santiago Pedraz que, «a la máxima urgencia», pida informes policiales sobre un acto de homenaje a etarras muertos similar al celebrado este pasado sábado en Oiartzun (Guipúzcoa) y convocado para hoy en la localidad alavesa de Llodio.

Según informaron fuentes jurídicas, el fiscal hizo esta solicitud al dar traslado al magistrado de una denuncia presentada por la asociación Dignidad y Justicia, en la que se asegura que durante la celebración de Oiartzun «se hizo un llamamiento generalizado a la movilización» para participar en el acto de hoy.

Mientras, sigue la violencia callejera. La sede del Partido Socialista en la localidad alavesa de Iruña de Oca fue atacada en la madrugada de ayer con un artefacto de fabricación casera que causó escasos daños, según informó el departamento de Interior del Gobierno Vasco.

El artefacto explosionó de forma parcial y únicamente provocó el ennegrecimiento de la fachada de la sede socialista.

Además, durante la noche del lunes y madrugada del martes hubo otros actos violentos como la quema de contenedores y un cajero automático en Bilbao.