Al término del programa, Chaves mantuvo que la experiencia de enfrentarse a las preguntas de 60 ciudadanos andaluces ha sido "muy interesante y gratificante" y "distinta a los debates políticos" que a lo largo de su carrera política ha afrontado. "Te encuentras con la sorpresa de que nunca sabes por dónde van a tirar", manifestó el líder andaluz, que apostó por "ampliar este tipo de programas".

Chaves insistió en la publicitación de su cuenta corriente y defendió la obligación de los políticos de ser transparentes. En este sentido, negó una posible sensación ciudadana de descrédito a la política. "En general no he visto que haya gente que no crea en los políticos y si los hay, han sido los menos".

Por otro lado, el presidente andaluz aseguró que la pregunta que más le sorprendió fue la relativa a la homeopatía, formulada por Virginia Gómez, una ama de casa cordobesa, que defendió este tipo de medicina alternativa. Chaves admitió que ésta fue la interpelación que más trabajo le costó contestar porque "no estaba muy bien informado". En su respuesta a Virginia, Cháves asumió los reproches de ésta y manifestó su propósito de incluir la homeopatía en el Servicio Andaluz de Salud.

Durante el cóctel posterior al programa, donde algunos de los participantes aprovecharon para buscar la réplica a su contestación y momento en el que los que no tuvieron oportunidad de preguntar se acercaron a Chaves para formularle sus dudas, el líder autonómico lamentó la desilusión de algunos por no haber podido participar pero emplazó a cada uno de ellos a "tomar un café" cuando visite sus respectivas provincias. Algunos fueron más allá y le reclamaron a Cháves, "al menos una invitación a comer".

NERVIOSO AL PRINCIPIO, MÁS CLARO DESPUÉS.

Ante las cámaras de televisión, Chaves comenzó a responder un tanto nervioso y en las primeras preguntas dio algún que otro rodeo pero a medida que avanzó el programa se fue mostrando más claro y ganando en concrección. Abordó las respuestas sin tantos rodeos, allanó el lenguaje y se mostró cada vez más directo, incluso entre los muchos que le rebatieron las respuestas o hacia los que le plantearon varias cuestiones en una misma intervención.

El presidente andaluz, que llamó por el nombre a cada uno de los improvisados periodistas pero les trató de usted, contestó un total de 28 preguntas -42 con las repreguntas-- . En total, preguntaron seis ciudadanos de Málaga, seis de Jaén -tres de los cuales eran de la localidad de Linares--, cinco de Sevilla, otros cinco de Cádiz -dos de ellos del campo de Gibraltar--, dos de Granada y otros dos de Almería y uno más de cada una de las provincias de Córdoba y Huelva.

En ellas Chaves abordó temas como la sanidad, las infraestructuras, la educación o el turismo. Aunque también tuvo que hacer frente a otras más polémicas como, además del dinero que ahorra en su cuenta bancaria, la concesión a la duquesa de Alba del título de Hija Predilecta de Andalucía o su futuro en la política

El dirigente andaluz aguantó estoicamente cuando Javier Fernández, de Motril (Granada), uno de los entrevistadores más polémicos de la noche, que se definió como "anti este sistema", calificó de "mierdecilla" los cuadros de Pablo Ruiz Picasso, del que dijo que "repite sus churros una y otra vez". Chaves aceptó la petición que le hizo este restaurador y accedió a mantener un encuentro de media hora con él para continuar debatiendo sobre política, una invitación que finalmente hizo extensiva a todos los participantes.