La semana pasada os contaba cómo empezar a planificar una boda, y uno de los primeros puntos era decidir qué tipo de boda queremos. Hoy en día hay tantas opciones que la tarea no es nada sencilla, aunque os propongo empezar por escoger el entorno ideal. ¿Qué es mejor una boda urbanita, una campestre o, en cambio, una playera?
La respuesta sólo podéis tenerla vosotros, y afortunadamente el abanico de opciones para cada una de estas localizaciones es amplísimo! No obstante, sí que os puedo dar unas directrices para ayudar en la decisión.
Boda en la ciudad
Celebrar vuestro gran día "sobre asfalto" pudiera parecer la opción menos estilosa, aunque nada más lejos de la realidad. Existen multitud de hoteles y salones que te permiten hacer una gran celebración de estas características. Uno de los puntos a favor es el desplazamiento de los invitados, o bien en su propio vehículo o con la ayuda de un taxi, llegar e irse de la boda va a ser comodísimo para ellos. Otra ventaja es la posibilidad de combinar diferentes espacios (ceremonia y banquete) pero cercanos entre sí. Piensa que en una masía o un restaurante de playa estas dos partes del evento se harán en entornos muy similares mientras que en la ciudad puedes "cambiar de aires" muy fácilmente.
No te conformes con los cientos de propuestas que ya de por sí puedes encontrar en los portales de bodas, existen también muchos espacios singulares con la posibilidad de alquiler para el gran día en el que puedes dar rienda suelta a tu creatividad. Museos, antiguos conventos o espacios públicos pueden ser el escenario perfecto para tu enlace.
Boda entre lirios y balas de paja
Las masías y alquerías para bodas están en auge, no hay localidad en nuestro mapa que no cuente con una oferta de este tipo. Podría aventurarme a decir que es el tipo de bodas que más demanda tienen en la actualidad, en gran parte debido a que son menos protocolarias y más distendidas. Piensa que la época del año es importante en este tipo de bodas, si es la opción que más te gusta evita los meses de calor sofocante o tenlo en cuenta cuando visites opciones; hacer el cóctel en el jardín tiene mucho encanto pero si no hay espacios de sombra puede convertirse en una tortura para tus invitados. Pon en tu lista la posibilidad de regalar paipáis o abanicos personalizados, pueden venir muy bien!.
Si tu boda será nocturna ten en cuenta la posible presencia de insectos que no has invitado. Pero nada que no solucionen unas velas de citronela estratégicamente colocadas. También importantes los accesos al lugar, y la posibilidad de alguna zona de parking cercano para todos tus invitados. Un invitado que llega a una alquería preciosa puede ponerse de muy mal humor si no sabe dónde meter el coche.
Una boda en el campo no tiene porqué ser informal, puedes crear una combinación preciosa vistiendo unas mesas muy elegantes con mantelerías de colores cálidos y vajillas blancas bajo un manto de tiras de luz enganchadas entre la arboleda. La elegancia reside en los detalles y siempre que sigas una línea armoniosa teniendo en cuenta que la tuya es una boda campestre tus invitados pueden sentirse igual que en un gran hotel.
Boda junto al rumor de las olas
Una de las bodas de estilo más desenfadado e incluso hippie. Es una de las opciones más difíciles de gestionar pero no por ello imposible. Debes saber que conseguir los permisos para realizar las ceremonias sobre la arena de la playa no es nada sencillo, necesitas preguntar a la Demarcación de Costas o Ayuntamiento correspondiente, aunque hay locales a pie de playa que sí las organizan sin necesidad de todo este papeleo. No te será complicado informarte de cuáles son.
Si te aventuras con este plan, busca una alternativa en caso de lluvia, el tiempo está loco y no puedes arriesgarte! Existen hoteles y restaurantes en primera línea de mar que podrán salvarte en caso de aguacero. Otro punto importante es que debes avisar a tus invitados del tipo de boda al que asistirán, no tiene sentido que ellos se vistan muy formales y ellas con tacones de aguja para estar sobre la arena, ¿verdad?. Puedes mantener la sorpresa hasta el último momento y repartir unas chanclas playeras y añadir así el toque divertido.
Si llegados a este punto ya podéis imaginaros en uno de estos tres escenarios estamos listos para empezar a dibujar cada uno de los integrantes de la obra y desgranar poco a poco el guión de nuestro gran día. Allá vamos!
