Hyundai ha demostrado que el talento y el buen hacer puede suplir a la experiencia, al lograr un modelo excepcional en su primera aventura 100% híbrida. El Ioniq hace pensar que la firma coreana lleve toda la vida haciendo este tipo de vehículos, por su buen comportamiento, por la efectividad y ´naturalidad´ con la que combina el motor de combustión y eléctrico, por la gran autonomía de sus baterías, y por cómo ha logrado crear una preciosa carrocería pese a cumplir con las exigencias aerodinámicas y de espacio que requieren este tipo de coches. De todo esto y mucho más nos dimos cuenta al finalizar nuestra última ´Ruta híbrida´, que en esta ocasión nos llevó hasta la Vall d´ Albaida y más concretamente hasta la preciosa localidad de Bocairent.

El Hyundai Ionic es un modelo distinto a la mayoría de híbridos que hemos conducido hasta la fecha por multitud de aspectos, desde precisamente su atractivo diseño, pasando por su comportamiento y acabando por la sofisticada parte técnica. Este Hyundai monta un innovador motor de gasolina Kappa GDI de 1.6 litros de cilindrada al que se añaden 43,5 cv adicionales de propulsor eléctrico, alimentado por una avanzada batería de iones de litio polímero. Estos dos sistemas de desarrollan una potencia conjunta máxima de 141 cv y 265 Nm de par motor. Al contrario que la mayoría de sus rivales en el mercado, este conjunto propulsor se asocia a una transmisión de doble embrague (DCT) de seis velocidades que presenta un avanzado cambio de marchas, una experiencia única de conducción dinámica y que se conjuga con un notable ahorro de combustible.

En marcha...

Encendemos el coche, ponemos todos los parámetros a cero y comenzamos la prueba en unos de los entornos más hostiles para los coches híbridos, las vías rápidas. Tomamos la A-7 en dirección a Alicante por la que transitamos más de 70 kilómetros. En este contexto el Ioniq se comporta como cualquier otro vehículo, pero al abandonar la autovía y sumar unos cuantos kilómetros más por la CV-40 en busca de Bocairent, nos damos cuenta que el sistema híbrido ha actuado en la sombra para lograr un excelente consumo de 5,0 litros a los 100 km recorridos.

Por la CV-81 llegamos finalmente a Bocairent, pero accedemos a ella por la parte norte, desde la que divisamos una panorámica increíble del casco antiguo, declarado conjunto histórico-artístico. Tras cruzar el puente de piedra que da acceso a la ciudad, comenzamos a recorrer sus infinitas y estrechas callejuelas cargadas de encanto y que en su mayoría desembocan en una ovalada y preciosa plaza principal. Recorriendo el casco antiguo nos reafirmamos en nuestra idea de que el Ioniq es distinto a los otros híbridos. El modelo de Hyundai no comienza casi nunca la marcha en modo eléctrico, sino que se activa el propulsor de combustión para junto al eléctrico alcanzar una velocidad de crucero idónea. Una vez lograda sí emplea sólamente la propulsión eléctrica, que se mantiene hasta velocidades mucho más elevadas que en otros coches híbridos.

Bocairent, a fondo

Gracias a la gentileza de las autoridades de Bocairent, y la amabilidad de Mats, gerente del Hotel L´Estació, pudimos

llegar con el Ioniq allá donde normalmente no se puede acceder con coche. Tanto es así que con él nos metimos hasta el mismo centro de la plaza de toros. El contraste de un coche tan moderno y avanzado como el Ioniq sobre la arena de la plaza más antigua de la Comunitat Valenciana (1843) , fue sencillamente mágico.

También descendimos hasta la propia puerta de entrada a la Cava de Sant Blai, una especie de cueva construida en el siglo XVII que se utilizó como nevero hasta el siglo XX y que en la actualidad alberga un centro de interpretación sobre la importancia económica de la nieve. Desde este mismo punto se tiene además una vista privilegiada de les Covetes del Moros, un grupo de cuevas artificiales con orificios en forma de ventana que asoman a un gran acantilado sobre el barranco de la Fos. Actualmente, está considerado como Bien de Interés Cultural y fue declarado Monumento histórico-artístico perteneciente al Tesoro Artístico Nacional .

De una de las partes más bajas de Bocairent nos vamos a un enclave elevado desde donde se tiene una vista privilegiada de toda la población,la ermita de Sant Jaume. Pasamos del modo de conducción ´Eco´ al ´Sport´, y por el recorrido serpenteante que nos lleva hasta este enclave descubrimos el excepcional trabajo de los ingenieros de Hyundai a la hora de construir el chasis del Ioniq, puesto que muestra una estabilidad y un dinamismo envidiables. Y lo mejor de todo es que tras exprimir el motor al máximo en este divertido recorrido, el ordenador de a bordo marcaba tan sólo 5,7 l/100 km, gracias al apoyo del motor eléctrico en las aceleraciones.

Serra Mariola

Nuestro siguiente destino a bordo del Ioniq era la Font de Mariola, un área recreativa situada en pleno Parque Natural de la Serra Mariola, a unos 12 kilómetros de distancia de Bocairent. Antes de salir miramos la autonomía de la batería y comprobamos sorprendidos que, pese a la exigencia de las callejuelas del casco antiguo, ésta se mantenía con una autonomía del 50%. Precisamente este aspecto es uno de los más destacables del Ioniq. Las baterías, que van situadas bajo la banqueta de los asientos posteriores „por lo que no resta espacio a su destacada habitabilidad y a su generoso maletero de 443 litros„ son de polímero de iones de litio, con una capacidad de 1,56 kWh. Esta moderna composición permite que tenga un desgaste mucho menor que las baterías de otros coches híbridos, y que a su vez logre una recarga más rápida tanto en cargadores específicos como en los domésticos.

La CV-794 que recorre por el mismo corazón de la Serra Mariola, es una carretera con unas vistas preciosas, unas curvas perfectas para la conducción y un estado del firme excepcional. Es decir, el sueño de cualquier conductor, y especialmente de los moteros, ya que este enclave está además impregnado con el olor de una agradable mezcla de hierbas aromáticas típicas de la zona.

En este tramo volvemos a disfrutar de la capacidad de rodar en modo 100% eléctrico del Ioniq. Una vez alcanzamos una velocidad de crucero óptima se apagó el motor de combustión, y sólo con la propulsión eléctrica logramos alcanzar prácticamente ¡100 kilómetros por hora!, una velocidad increíble para un modelo híbrido. Sólo en vehículos 100% eléctricos habíamos podido conseguir algo así.

Tras gozar del paraje natural que rodea a la Font de Mariola, deshacemos el camino trazado en nuestra escapada y pasamos de nuevo por delante de Bocairent, para coger la A7 en dirección a Valencia a la que llegamos con un consumo final de 4,9 litros y con la sensación de haber realizado el viaje en un coche totalmente convencional, pero con las grandes ventajas de un híbrido.

Hotel L´estació

Hotel L'Estació, es un singular hotel, ubicado en la antigua estación de tren de Bocairent en medio de un precioso parque lleno de árboles. Cuenta con 14 habitaciones equipadas con todos los detalles de un gran hotel y con una tranquila cafetería de techos altos, una sala de estar con chimenea, un patio interior, maravilloso para la lectura o la charla en las tardes de primavera y verano. Mención aparte merece su restaurante de fresca cocina de mercado especializada en Carne a la Piedra, con terraza acristalada.

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Hotel l´ Agora

Situada en el núcleo urbano de Bocairent, esta antigua casa señorial transformada en un encantador hotel, cautiva a los huéspedes ya desde su exterior gracias a una exquisita fachada de estilo modernista. Destaca la decoración temática de sus habitaciones, con motivos tailandeses, chinos, africanos y pakistanís y muebles de la época colonial. A L´Agora pertenece también el excepcional restaurante el Cancell.

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